El por aquel entonces conselleiro de Pesca, Enrique López Veiga, vivió sin duda los días más amargos de su vida política, aunque, eso sí, defiende a capa y espada la gestión que desde la Xunta se realizó del siniestro.
- Hay quien les achaca que tanto la Xunta como el Gobierno fueron lentos e ineficaces a la hora de reaccionar. ¿Cuando se percataron de la magnitud de siniestro?
-Fuimos conscientes desde el primer momento del grave potencial de la situación; lo tuvimos presente desde el principio y se hicieron los preparativos, al menos desde la consellería de Pesca, siempre asumiendo lo peor. Por eso, dentro de nuestras competencias, que no eran las de Salvamento Marítimo, nos concentramos en arbitrar un sistema de ayudas para que nadie quedase sin ingresos. De hecho, a los quince días, ya estaban cobrando todos los afectados y, el que menos, en torno a 1.500 euros al mes.
-El propio Manuel Fraga reconoció, no obstante, que se habían cometido errores informativos. ¿A qué se refería exactamente el presidente de la Xunta?
-Nunca se ocultó nada, otra cosa es lo que se ha querido interpretar. En todas mis declaraciones siempre asumí que se trataba de una marea negra, aunque los primeros días lo que llegaba a la costa no era mucha cantidad. Yo creo que a lo que se refería el presidente de la Xunta era a la actitud de falta de sensibilidad de ciertos altos cargos del Gobierno. Hubo, quizá, una ausencia inexplicable del ministro de Fomento, Álvarez Cascos, con plenas competencias en este asunto; e incluso el propio Aznar tardó mucho en venir. Fraga tuvo algún problema de comunicación en algún momento determinado, pero cuando le advertí de la seriedad del incidente, se plantó aquí de inmediato. De quien tampoco hubo queja alguna fue del comportamiento de Mariano Rajoy. Doy fe de que siempre actuó de una manera eficaz y muy sosegada, como él acostumbra.
- Si ocurriese hoy un accidente similar, ¿en qué estaríamos más y mejor preparados?
-Cuando un petrolero se hunde, la marea negra es difícil de evitar. Ese "Nunca Máis" que tanto se reclamó es imposible de cumplir, es una mentira. Sin embargo, sí es verdad que hoy tenemos muchos más medios y capacidad de reacción de los que teníamos. Y aún así, la capacidad de reacción que tuvimos no fue ni mucho menos baja, porque en poco tiempo ya estaban en Galicia todos los medios disponibles en Europa, como sucedió con los dos buques holandeses y el francés, que resultaron ser los más eficaces recogiendo fuel.
- ¿Está de acuerdo con la sentencia del juicio?
-Totalmente. La sentencia da la razón a la tesis que yo mantengo desde el principio: el alejamiento no era una opción equivocada. Llevo 15 años retando públicamente a los que mantienen tesis distintas para que me digan exactamente dónde hubieran metido el buque y no hay valor ni coraje para decirlo. Callan porque no había otra opción ¿Acaso querían que al "Prestige" lo remocalsen hasta la ría de Vigo? Repito: nadie me ha dicho qué es lo mejor que se pudo hacer y no hicimos. ¿Por qué? Pues porque no hay una respuesta válida y honesta a esta pregunta.
