Un año y dos meses de prisión y multa. Esta es la condena que aceptó ayer en la Sección Quinta de la Audiencia con sede en Vigo un acusado de estafa por apropiares de más de 41.000 kilos de mejillón valorados en 224.00 euros. La Fiscalía solicitaba inicialmente 5 años de prisión y una multa de 3.300 euros, pero rebajó la propuesta al aplicarse la atenuante de reparación del daño.
El acusado, como representante legal de la empresa MAR S. SLU y actuando como mandatario verbal de la firma mercantil Bacalaos E. S.A. en la intermediación de compraventas de mejillón procedente de Nueva Zelanda, consiguió que otra compañía adquiriese los productos sin que el dinero fuera entregado a la firma que él representaba, sino que lo incorporó a su patrimonio personal.
