Galicia se mantiene como una de las comunidades más seguras de España, que a su vez es el tercer país europeo con menos delincuencia. La comunidad gallega es la cuarta con menor tasa de criminalidad con 27,3 infracciones penales por cada millar de habitantes, 16 puntos por debajo de la media nacional. En el primer semestre del año, Galicia sumó 35.883 delitos, lo que supone un descenso de la criminalidad del 0,7%. Por provincias, las infracciones penales por cada 1.000 vecinos se redujeron en Lugo en más del 5% -de 3.511 a 3.326-, en Ourense en casi un 6% -de 3.760 a 13.549- y en Pontevedra en un 0,4% -de 13.171 a 13.124-. Solo creció la delincuencia en la provincia coruñesa con un 1%, al subir de 15.677 a 15.884 delitos y debido, sobre todo, a un incremento del 20,4% en delitos relacionados con tráfico de drogas. Sin embargo, destaca la reducción del 17,2% en los robos con violencia e intimidación y el descenso en un 33,3% en asesinatos y homicidios.

En la provincia de Lugo el mayor descenso global se ve reflejado en los delitos contra el patrimonio y los robos con fuerza en domicilios. Del mismo modo, los datos del Ministerio del Interior registran una bajada en un 50% los delitos relacionados con pornografía infantil y corrupción de menores, y en un 18,5% las infracciones relacionadas con el tráfico de drogas. Al igual que en_Lugo, los robos con fuerza en Ourense también se han reducido, en concreto, en un 29,4%. Además, los hurtos cayeron un 10%.

En el caso de la provincia de Pontevedra, el documento destaca que han bajado "significativamente" los robos con violencia en domicilio, con un 37% menos de incidentes. Además, cayeron en un 16% las sustracciones de vehículos y en un 100% los casos de corrupción de menores. Destaca, por el contrario, en esta provincia el aumento de los homicidios y asesinatos, al registrarse cuatro en este semestre frente a solo uno en el mismo período de 2016.

A nivel nacional, el número de delitos en España en los seis primeros meses del año creció un 0.8% con respecto al mismo periodo de 2016, si bien la tasa de criminalidad se mantiene estable pese a ese aumento y se sitúa en el 43,3%. Durante el primer semestre de este ejercicio, el cómputo de infracciones penales asciende a 999.924, mientras que en los seis primeros meses del año pasado fue de 992.476. Esta cifra, pese a revelar un cierto incremento de las infracciones penales, muestra "una estabilización" de la tasa de criminalidad, según destaca Intea.

En este balance este año se incluyen datos de criminalidad de las capitales de provincia y las localidades con población superior a 30.000 habitantes. Esto supone un incremento de 100 nuevos municipios de los que se ofrece información en este ámbito, pasando de 148 localidades en los informes de años anteriores a 248.