Mientras dos abogados que llevan el caso de Cangas de Los Morones por presunta extorsión en mercadillos se entrevistaban en A Coruña con el fiscal superior de Galicia, Fernando Suances, para intentar la revisión de las fianzas de Sinaí y sus dos hermanos Juan Paulo y Saúl con el fin de sacarles de prisión donde llevan más de un año, la madre Flora Jiménez Gabarri hacía lo mismo pero mediante una carta a la opinión pública. "Pido a la justicia que tienen en sus manos a mis hijos que, por favor, les den la libertad", asegura la mujer, que se queja de que no tienen dinero.

La madre del clan asegura que el cuarto de sus hijos, Marino, ya no está en prisión porque hizo frente a la fianza rebajada a 50.000 euros, que fue posible, dice "gracias a que familiares, amigos y conocidos, tanto gitanos como payos, ingresaron diversas cantidades hasta completar el total". Sobre sus otros tres hijos, afirma que están presos "sin motivo y sin razón".