La joven desaparecida y hallada muerta en Santiago falleció por hipotermia
Las conclusiones provisionales de la autopsia apuntan a que se trata de una muerte accidental -El juzgado entregó ayer el cuerpo a la familia
Ni violencia externa ni participación de otras personas, sino muerte accidental y por hipotermia. La conclusiones provisionales de la autopsia descartan una muerte homicida en el caso de Lourdes González, la joven ourensana de 31 años que desapareció de su domicilio en Santiago el pasado miércoles y cuyo cadáver fue localizado el sábado en el monte Pedroso, a unos 4 kilómetros de su domicilio. Los forenses indican que murió de frío y confirman así la principal hipótesis de la Policía Nacional, que se ha hecho cargo de la investigación de lo ocurrido, y que no hallaron evidencias de violencia en el cuerpo ni en la zona boscosa y de difícil acceso donde fue hallado el cuerpo.
Todo apunta que la joven, que apareció desnuda, iba sola y fue quitándose y tirando la ropa que sirvió de rastro a los agentes para dar con su cadáver. Primero se hallaron las prendas de ropa que vestía, y después su teléfono, cuyo análisis podría aportar más datos a los investigadores para conocer qué hizo o con quien habló en sus últimas horas. De momento no se ha determinado la fecha de su muerte, pudo ser el jueves o el viernes, si bien se ha confirmado que el fallecimiento se produjo por hipotermia.
El Juzgado de Instrucción 3 de Santiago, en funciones de guardia, se ha hecho cargo de la investigación. Su titular, según informó el Tribunal Superior de Xustiza de Galicia, autorizó al mediodía la puesta a disposición de la familia del cuerpo de la joven. La investigación se encuentra en una fase inicial y aunque los resultados preliminares de la autopsia indican que se trata de una muerte accidental, sin que por el momento haya indicios de la existencia de hechos delictivos, todavía están pendientes muchos informes, como el resultado de las pruebas toxicológicas y biológicas enviadas al laboratorio de Madrid para su análisis.
Lourdes González salió de su casa en la zona de Galeras el miércoles a medianoche para recoger agua en una fuente cercana, algo que era habitual según su entorno. Su novio, con quien vivía en Santiago, la vio una hora después paseando nerviosa pro el exterior de la vivienda. Ya no regresó. Denunció su desaparición y comenzó la búsqueda que finalizó con el hallazgo de su cadáver.
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