La Guardia Civil investiga a un joven de 19 años, que responde a las iniciales Y.S.G.. vecino de Cangas, como supuesto autor de un delito contra la salud pública, acusado de promover y facilitar el consumo de sustancias estupefacientes a menores de edad. Al parecer preparó una infusión de marihuana con leche y tres chicas, dos de ellas menores, acabaron en el centro de salud de Cangas. El mismo joven avisó a la ambulancia cuando sus amigas empezaron a encontrarse mal.

El centro sanitario alertó a las fuerzas de seguridad que descubrieron que un grupo de amigos, entre ellos dos adolescentes de 16 años, se había puesto de acuerdo para realizar una velada nocturna en una casa deshabitada, propiedad del abuelo de uno de ellos, con la supuesta finalidad de consumir hachís. La Guardia Civil sostiene que la reticencias de las chicas a fumar el hachís hizo que el anfitrión optase por preparar una infusión a base de leche y marihuana, que consumieron entre todos.