Un vecino de la localidad pontevedresa de Salceda de Caselas negó ayer ante las magistradas de la Sección Cuarta de la Audiencia de Pontevedra haber abusado sexualmente de una menor, tal y como sostienen fiscal y acusación particular. Las acusaciones sostienen que el procesado se valió de la excelente relación que tenía con la familia de la niña, de la que era vecino, para cometer estos hechos que él rechaza tajantemente.

En el juicio celebrado en Pontevedra declaró asimismo la niña, de 7 años de edad en el momento de los hechos y que tiene 12 en la actualidad. Sin embargo, se mostró muy nerviosa y apenas pudo responder a las preguntas de del tribunal, del fiscal y de los abogados. Manifestó "no recordar bien" mucho de lo sucedido y respondió que le daba "corte" hablar de lo que le pasó con el acusado, por lo que tuvo dificultades para relatar los supuestos abusos que sí contó en fase de instrucción y a algunos de sus allegados. La menor apenas respondió con un "sí" a preguntas concretas del fiscal como si había visto alguna vez al acusado con los pantalones bajados o si le había tocado el pene, a lo que respondió "creo que sí".

El fiscal decidió mantener la petición de 10 años de prisión para el acusado, quien asegura que la niña estaba "obsesionada" con él.