El Plan Nacional sobre Drogas (PNSD) busca un comprador para la casa embargada al narcotraficante Laureano Oubiña. Ha renunciado a la subasta como sistema para tratar de adjudicar el inmueble, ante la ausencia de ofertas en la puja del año pasado, e intentará venderla mediante "otras fórmulas jurídicas", entre las que no se descarta el procedimiento de venta directa negociada.
La entidad dependiente del Ministerio de Sanidad celebra el jueves de la próxima semana (día 12) una subasta con una treintena de inmuebles intervenidos en toda España a personas condenadas por narcotráfico o blanqueo de capitales. Prácticamente la mitad de estas propiedades se encuentran en Galicia, y algunas de las más significativas o con mayor carga simbólica son las de Laureano Oubiña Piñero y José Antonio Pouso Rivas, "Pelopincho".
En el caso de Oubiña sale a subasta su finca urbanizable a pie de costa situada en Nanín (Sanxenxo), pero no así la casona de Vilagarcía de Arousa que empezó a construir a finales de la década de los 90 con su esposa, Esther Lago, y que quedó sin terminar tras la detención de Oubiña y el fallecimiento de su mujer en un accidente de tráfico.
El PNSD explica que el hecho de que el inmueble no figure entre los lotes por los que se va a pujar el día 12 en Madrid no significa que se haya vendido, y también descarta que se le vaya a ofrecer a una agencia inmobiliaria para que sea ésta la que gestione posteriormente su alquiler o venta.
"Existen otras fórmulas jurídicas que la Delegación del Gobierno para el Plan Nacional sobre Drogas está estudiando para lograr que la sociedad pueda beneficiarse del valor de una propiedad incautada a un narcotraficante", manifiesta la entidad, que aclara que "por el momento la mesa que gestiona el Fondo de Bienes Decomisados no ha tomado una decisión al respecto".
Se da la circunstancia de que en su día se colocó en una de las ventanas del chalé un cartel grande de "en venta" con un número de teléfono. Preguntados por este detalle, en el Plan sobre Drogas declararon que dicho cartel iba a ser retirado por personal de la Sociedad Estatal de Gestión de Patrimonio Inmobiliario (Segipsa), que es la que está tramitando la actual subasta. Y en efecto, en la actualidad el cartel ya no está en la ventana, aunque fuera quien fuese quien lo retiró, tardó meses en hacerlo.
Asimismo, en su día hubo quejas de vecinos colindantes con la propiedad de los Oubiña, por el tamaño de las ramas de las tuyas del perímetro de la finca, y la caída de hojas en sus patios. Sobre esto, el Plan sobre Drogas manifiesta que "no nos ha llegado ninguna queja ni reclamación de los vecinos".
La casona decomisada a Laureano Oubiña está pegada a otras de su familia política -incluso comparten tejado- y dentro de un cierre conjunto. Por fuera está terminada, aunque por dentro ni siquiera está revestida. El Plan sobre Drogas la sacó a subasta el invierno del pasado año por 366.000 euros, pero quedó desierta pues nadie se interesó por la propiedad.
