Sergio Morate, el presunto autor de los asesinatos de Marina Okarinska y Laura Morate, de cuya desaparición ya se cumple un mes, permanece en la prisión de Estremera, en Madrid, tras su ingreso a primera hora de la tarde de ayer.
El magistrado titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Cuenca decretó al mediodía de ayer su ingreso en prisión, comunicada y sin fianza. Durante su comparecencia, Morate se acogió a su derecho a no declarar.
Salió de los juzgados de Cuenca a las 14 horas con la misma ropa, gorra incluida, con la que había llegado en avión desde Rumania once horas antes. Los vecinos, que ya lo habían increpado a su llegada a las dependencias conquenses de madrugada, volvieron a lanzarle gritos y acusaciones mientras era trasladado.
