La Audiencia Provincial de Pontevedra acogerá este martes el juicio por un intento de homicidio ocurrido en Poio en febrero de 2013 y que tendría como trasfondo, según el fiscal, la intención de la viuda de un militar de cobrar de forma íntegra una pensión de viudedad tras la muerte de su marido y que tenía que repartir con quien también fuera su cónyuge. En el banquillo se sentará una vecina de Silleda, María Sara D. J. , de 57 años, a quien se acusa de haber intentado matar a la septuagenaria L. E.R. D., de A Caeira, en Poio. El fiscal pide 7 años de prisión para la acusada, así como que indemnice a la víctima con 24.000 euros, además de abonar al Sergas 19.200 euros por la atención a esta última, a quien la imputada seccionó el cuello.

Según el fiscal, María Sara contrajo matrimonio en 2004 con un varón, militar, con quien convivió hasta su fallecimiento en 2007. Por la normativa del Instituto Social de las Fuerzas Armadas, la pensión de viudedad se concretó en una cuantía igual al 50% de la pensión de retiro y esta cantidad se compartía entre la viuda, la acusada, y la excónyuge, víctima, en función del tiempo de convivencia de tal manera que a la primera le correspondía un 7,73% de la pensión de retiro y a la segunda un 42,26%. En caso de fallecimiento o pérdida de aptitud de la excónyuge, la parte de pensión que percibía esta acrecería en la pensión de la viuda.

El escrito del Ministerio Público señala que en 2012 "surgió en María Sara la idea de acabar con la vida de la denunciante con el objeto de convertirse en beneficiaria única de la pensión". El presunto intento de homicidio fue el 1 de febrero de 2013: la imputada fue al domicilio de la víctima en Poio y, cuando ésta abrió la puerta, la hirió gravemente con un cuchillo de cocina, tras lo cual huyó. La perjudicada presenta secuelas, como disfonía, debido a las lesiones.