Rosa Charlín, una de las cuatro personas acusadas de un delito contra la seguridad pública cuyo juicio estaba previsto para ayer en la sección sexta de la Audiencia Provincial de A Coruña, con sede en Santiago, y para la que el fiscal pedía siete años, quedó absuelta.

El Tribunal Superior de Justicia de Galicia pedía para todos ellos penas de prisión de entre cuatro y nueve años, y multas de entre 22.000 y 270.000 euros.

Los otros tres procesados, acusados de dedicarse a la venta de droga -les requisaron sustancias valoradas en 100.000 euros-, han visto rebajada su condena.