El padre de Yasmina V. llevaba una hora buscando a su hija por Moaña: "Me dijo por la mañana la Policía que las pistas apuntaban a que los cuatro estaban aquí. Que durmieron aquí desde la primera noche". Tras aparecer los chicos, se mostraba nervioso, aunque no ocultó su alivio. "Están bien. Fue una chiquillada, vamos a dejarlo así", decía. Asegura que esta semana "pateé muchas zonas de Vigo, como Samil o A Madroa". Abandonó la jefatura policial de Moaña con su hija, que lloraba.

Los menores deberán declarar ante el SAF de la comisaría viguesa, que coordinó la búsqueda y las pesquisas. Pero aunque la investigación sigue, todo apunta a que todo se quedará en un susto.