Los cuatro detenidos -un matrimonio con sus dos hijos- por la agresión a un joven en la calle Santander del barrio vigués de Teis, pasarán mañana a disposición judicial. Previsiblemente, el Juzgado de Instrucción 2 -de guardia cuando se efectuó la agresión- asumirá la causa después de que el Juzgado de Instrucción Número 2 se inhiba, informa Marta Fontán.

La calle Santander, en el barrio vigués , fue escenario ayer de una violenta reyerta en la que llegaron a emplearse palos y que se saldó con cuatro dominicanos detenidos y varios heridos. La trifulca se registró a media tarde, sobre las 17.00 horas, en la calle, a las puertas de un conocido gimnasio de la zona. Según explican fuentes de la Policía Nacional, el motivo que desató la pelea podría ser una deuda económica. A última hora de la tarde los agentes aún tomaban declaración a los detenidos para esclarecer lo ocurrido.

La reyerta se habría iniciado al ver dos de los detenidos a otra persona en la calle que mantenía una deuda con su padre. Al rato se presentaron en el lugar los otros dos detenidos, que, según concretan fuentes policiales, eran un hombre y una mujer. Tras proferir amenazas -según el relato de un testigo de los hechos- se agredió a la persona que habían visto en la calle Santander. Los detenidos portarían palos e incluso, el mayor de ellos, un cuchillo con el que se habría dirigido a la víctima.

Para evitar la agresión, varias personas que entonces estaban en la zona mediaron en la trifulca. Durante el proceso algunos resultaron heridos. Fuentes policiales apuntan que, a última hora de ayer, se examinaba a varias personas en centros de salud para determinar las posibles lesiones sufridas. Las mismas fuentes apuntan que los detenidos llegaron a encararse y enfrentarse a agentes de la Policía Nacional que se desplazaron hasta el lugar para controlar la situación.

Testigos que presenciaron la operación aseguran que al menos uno de los detenidos mostraba una actitud violenta hacia los agentes. También apuntan que, al menos una de las personas que se vio implicada en la pelea, presentaba una herida visible en la cabeza. Otros testigos señalan golpes en los costados y los brazos. Desde la Policía Nacional se concreta en cualquier caso que no la intervención no resultó sencilla. El juzgado que ayer permanecía de guardia en la ciudad era el de Instrucción Número Uno.

Responsables del gimnasio de la calle Santander se pusieron ayer tarde en contacto con este periódico para aclarar que la reyerta es completamente ajena al establecimiento y que, de hecho, la pelea se desarrolló en todo momento fuera de sus instalaciones deportivas. Testigos apuntan que fruto de la violenta trifulca llegó a reventarse parte de una de las vidrieras que tiene el negocio situadas en la entrada.