Sano y salvo. El médico portugués Antonio Veloso, jubilado y perteneciente a una familia muy conocida de Arcos de Valdevez , recuperó la libertad a las cinco de la tarde de ayer, casi 24 horas después de que el peligroso atracador de Mos, Saturnino Marcos Cerezo Cancelas, alias "Canceliñas", y el ciudadano luso Álvaro Miguel dos Santos Barbosa, le secuestraran con su coche en el aparcamiento de un hipermercado en Arcos de Valdevez. Entonces se emprendió una auténtica cacería policial con participación de las fuerzas de seguridad lusas y españolas para cercarlos y lograr la liberación del rehén. Con medio centenar de agentes siguiéndoles la pista, la presión policial les llevó a abandonar al médico en el monte Galleiro. Le entregaron una linterna, conscientes de que se le haría de noche antes de llegar a una casa habitada, y le dijeron que siguiera el tendido eléctrico. Tres horas después Antonio Veloso conseguía pedir ayuda en una vivienda de Padróns, Ponteareas. Aseguró encontrarse en buen estado y anoche era trasladado a la Comandancia de la Guardia Civil de Pontevedra, donde le esperaban sus familiares. El amplio operativo policial sigue en marcha en busca de sus secuestradores.

"Canceliñas" y Álvaro Miguel dos Santos siguen huidos en el Mercedes Benz clase S, de color gris, matrícula lusa 99HH42, del médico. "Canceliñas" no regresó a prisión tras un permiso penitenciario, según informó ayer el delegado del Gobierno en Galicia, Samuel Juárez. Está considerado un delincuente muy peligroso, autor de una cuarentena de atracos y robos, y va armado. Le acompaña en el mismo vehículo Álvaro Miguel dos Santos Barbosa, un portugués que residió en Salceda de Caselas. La Guardia Civil les atribuye los atracos a las estaciones de servicio de Guillarei (Tui) y en Torrón (Tomiño), perpetrados en los últimos días y un tiroteo con dos heridos en Porriño, como adelantó FARO DE VIGO.

El robo de un vehículo Clio en la localidad lusa de Paredes de Coura el jueves a las 12.30 euros, delató a los atracadores, que perseguidos por la GNR robaron en el mismo municipio una moto y otro vehículo Clio en un intento de despistar a los agentes. Ya en Arcos de Valdevez, en el aparcamiento de un hipermercado, secuestraron a Antonio Veloso cuando se dirigía a su vehículo, un Mercedes S gris. Le llevaron a a varios cajeros automáticos y le obligaron a sacar dinero en efectivo con sus tarjetas. Los policías portugueses, que recuperaron en una quinta de la Raia la moto amarilla utilizada en el atraco a la gasolinera y las gafas que se llevaron del expositor los ladrones, elevan a tres el número de secuestradores del médico, aunque solo dos pasarían con él a España.

La Guardia Civil, que tenía una vigilancia especial desde el tiroteo de Porriño, localizó el vehículo y a sus tres ocupantes a las 22.30 horas del pasado jueves en la estación de servicio del polígono de A Granxa, en Porriño. El empleado reconoció al atracador "Canceliñas", que se bajó para echar gasolina y avistó a los otros dos hombres en el coche. Un coche camuflado de la Guardia Civil estaba en las inmediaciones y empezó el seguimiento en España, pero los secuestradores lograron escabullirse.

El Mercedes Benz fue visto otra vez sobre las 0.20 horas del viernes en el parque natural Monte Aloia de Tui, donde se realizó un amplio despliegue policial, con varias unidades móviles y el apoyo del helicóptero nada más amanecer. En esta operación de búsqueda intervinieron efectivos de la Guardia Civil de los puestos de Baiona, O Porriño y Pontevedra, además de las Policías Locales y Cuerpo Nacional de Policía de Vigo y Nigrán. Pero otra vez se perdió la pista del vehículo en Vincios (Gondomar), donde tuvo lugar el último contacto visual.

La operación policial se amplió a toda la zona sur de Pontevedra, hasta el área de Vigo y Redondela, y también toda la franja fronteriza, donde anoche seguían numerosos controles en busca de los dos fugitivos. Un rastreo que las fuerzas de seguridad tenían previsto mantener hasta que sean detenidos.

Fuentes portuguesas aseguraban durante la persecución que tenían cercados a los fugitivos e incluso que se mantenían negociaciones para su entrega. Extremo que oficialmente fue desmentido en España. Una hora después, el médico secuestrado acaba tres largas horas de caminata y llegaba a la vivienda de Bordóns donde pidió ayuda

Enganchado a la heroína

Casi a medianoche un sobrino del médico secuestrados salía de la Comandancia de la Guardia Civil de Pontevedra y explicaba que Antonio Veloso se encontraba bien, aunque le dolían algo las rodillas. Relató a su familia que el secuestrador "español" fumaba todo el rato heroína y conducía "a toda velocidad" por carreteras secundarias y pistas "que conoce perfectamente". Así, expuso que cuando su compañero le dijo que se metiera por una carretera estrecha replicó "no, que seguro que está la Guardia Civil". Cree que lo secuestraron a él porque les gustó el coche.

El hijo del secuestrado ya se desplazó a primeras horas de ayer hasta Tui para recibir información de primera mano sobre el desarrollo del operativo de la Guardia Civil. Hasta el cuartel de Tui viajó también el cónsul de Portugal en Ourense ya que la víctima y él tienen amigos comunes.

En el puesto de la GNR en la localidad fronteriza de Valença do Minho también se presentó a media tarde Ricardo G., hermano del hombre tiroteado en Porriño, y cuyo vehículo, un BMW fue usado par ala fuga. Su intención es recuperarlo.

Casi a medianoche Antonio Veloso, que declinó realizar manifestaciones, abandonó la Comandancia de la Guardia Civil de Pontevedra con sus familiares de vuelta a su casa.