Los chats y las conversaciones telefónicas que mantenían algunos de los miembros de la red de pederastas presuntamente dirigida por un vecino de A Coruña de 45 años eran de contenido sádico. Así lo revelaron ayer fuentes cercanas al caso, que sostienen que las charlas de los ocho detenidos transcritas por los agentes de la Policía Nacional de la Policía Judicial son atroces. La mayoría de las comunicaciones entre ellos hacen referencia a maltratos a niños, a secuestros e, incluso, a asesinatos.

El 091 señala al coruñés como el presunto cabecilla de la organización, de la que formaban parte ciudadanos de diversas ciudades de España. En Galicia, además del vecino de A Coruña, la policía arrestó a residentes en Arteixo, Vigo y Bueu. De los ocho detenidos este mes permanecen en prisión provisional y sin fianza el coruñés, el arteixán y un madrileño.

El juez le imputa al supuesto líder de la red la comisión de un delito de proposición al asesinato, un delito de agresión sexual, otro de abuso sexual y un cuarto de corrupción de menores. El arrestado, sin embargo, alegó en las declaraciones que prestó ante la policía y el juez que participaba en los chats en los que intercambiaban relatos sobre abusos y prácticas sádicas con niños con el único objetivo de satisfacer sus deseos sexuales. El acusado recalcó que nunca llevó a la práctica ninguna de las acciones delictivas de las que conversaba con los otros imputados.

Los abogados que se encargan de la defensa del coruñés lo visitaron ayer en el centro penitenciario de Teixeiro, donde permanece ingresado. La instrucción del caso comenzó en un juzgado de Aranjuez porque fue en esa localidad donde un particular interpuso una denuncia contra el vecino de A Coruña, pero el órgano de la provincia de Madrid se inhibió a favor de los juzgados de las localidades donde fueron detenidos los ocho sospechosos. La instrucción sobre los presuntos delitos cometidos por el coruñés y el arteixán, por tanto, será dirigida por un juzgado coruñés. En el caso del vigués, que estuvo en prisión y ahora permanece en libertad provisional, la investigación judicial corresponderá a uno de los ocho juzgados de Instrucción de la ciudad olívica.

Desde diciembre

La investigación sobre los ocho arrestados en toda España comenzó en diciembre del año pasado. Los agentes decidieron interceptar a los presuntos pederastas este mes porque temían que pudiesen materializar el secuestro de algún menor.

Los funcionarios localizaron a dos niños -un amigo del hijo del arrestado en Arteixo y un menor relacionado con un imputado que está vinculado a una orden religiosa- como los objetivos de los miembros de la organización. Los imputados, según fuentes cercanas al caso, establecían los primeros contactos a través de internet. Después, algunos de ellos mantenían conversaciones telefónicas sobre prácticas sádicas con menores.