El alcalde de Salvaterra, Arturo Grandal, se mostraba anoche consternado por la terrible noticia y anunció que se decretarán dos días de luto oficial. El regidor relató que los dos niños acudían al colegio y son hijos de una de las muchas familias de inmigrantes asentadas en la localidad, atraídas posiblemente por la posibilidad futura de empleo en la zona y en Portugal, aunque no consta que en la actualidad los padres de los pequeños tuvieran trabajo.

El alcalde dijo que si la perdida de cualquier ser humano es irreparable, la de unos niños hermanos y en estas circunstancias aún se siente más. Trasladó su pésame a la familia y a toda la colectividad. Por otra parte, menores de la localidad que conocían a los fallecidos indicaron que eran chicos queridos que pronto se habían integrado. De hecho Yunes, a pesar de llevar solo cuatro meses en Salvaterra, ya formaba parte del equipo de fútbol de la categoría infantil.