"Menudo día de cumpleaños". Manuel C.C., vecino de Vigo, pronunciaba ayer estas palabras mientras salía de una sala de vistas. Cumplía años, pero la jornada para él no empezó para muchas celebraciones: tuvo que sentarse en el banquillo junto a otro vigués por un altercado en los soportales de O Berbés que acabó supuestamente con agresiones mutuas. El origen del incidente fue un malentendido por los perros que ambos llevaban. Y todo derivó en una pelea por la que se enfrentan ahora a penas de prisión.

Todo se remonta al 22 de abril de 2012. Un joven, David, se dirigía a su casa con su perro, que estaba "en celo". Según su relato en el juicio celebrado en el Juzgado Penal 3 Vigo, Manuel se acercó a él, con su can, y le preguntó si el animal "era macho o hembra". No le parecieron maneras y obvió la pregunta. "Entonces empezó a insultarme, se lo recriminé, se vino embalado y me dio dos golpes en la cara", cuenta David, que sufrió rotura de nariz. El joven niega ser el autor de las lesiones que tenía en la cabeza de su oponente: "Solo lo aparté; después él se cayó".

La versión del que ayer estaba de cumpleaños fue distinta. Reconoce que aquel día estaba "cocido", pero niega que asestase puñetazos al otro acusado. Al contrario, afirma que fue él quien recibió "una patada" en el pecho.