Subasta desierta. La ausencia de pujas por los 6.600 litros de gasolina que almacenaba el narcopesquero grovense Ratonero para abastecer a la planeadora que debía recoger los 3.500 kilos de cocaína que transportaba desde Venezuela y descargarlos en Galicia, ha obligado a la Autoridad Portuaria a contratar a una empresa especializada para retirar el combustible por 1.900 euros. Y es que la gasolina constituía un auténtico peligro por riesgo de explosión si se mantenía en el interior del barco, que se encuentra en depósito judicial atracado en el muelle vigués de O Berbés tras ser interceptado en el Atlántico el pasado mes de febrero.

El Ratonero podría tener también los días contados en su amarre actual. El próximo 10 de mayo saldrá a subasta para evitar su deterioro. El precio mínimo de salida es de 10.000 euros, pero quien se quede con el pesqueros y sus artes de pesca deberá hacer frente también a una hipoteca de 355.000 euros.

En la denominada Operación Marine, coordinada por la magistrada de Instrucción 3 de Vigo, Marisol López, fueron detenidas 11 personas, la mayoría viejas conocidas de las fuerzas de seguridad. A los cinco tripulantes del pesquero se sumaron los tres pilotos de la lanzadera varada en Madeira, caso del narcotransportista cambadés Baltasar Vidal, "Saro", condenado en la Nécora y heredero de la infraestructura del fallecido Patoco, y Cores Losada. Ambos estaban en libertad bajo fianza de 20.000 euros a la espera del juicio de la Operación Tabaiba. El tercer piloto, Búa Padín es yerno de otro histórico del narcotráfico arousano, Rafael Bugallo, "O Mulo".

A bordo del Ratonero, un barco bajo sospecha desde hace años, cayeron su patrón –el grovense José Luis Devesa– y el colombiano Anyer Eduardo Holguin, enlace con los cárteles y en libertad condicional tras una condena de 11 años por otro alijo; a quienes acompañaban los arousanos Albino G.P. y J.F.F., así como el uruguayo residente de O Grove A.E.H.C. Todos están en prisión provisional.

Un marinero dice ser inocente porque cuando se cargó el alijo "dormía", pero la Audiencia ratifica su prisión

Dos meses después del abordaje del Ratonero y la incautación de las tres toneladas de cocaína que transportaba, las defensas de los tripulantes del narcopesquero han comenzado a solicitado su libertad provisional. Al menos dos de los marineros han recurrido el auto de prisión dictado por la juez instructora, Marisol López, pero la Audiencia de Pontevedra ha dado la razón a la magistrada y al fiscal y permanecerán en la prisión de A Lama.

En ambos casos aseguran ser tripulantes a las órdenes del patrón y que desconocían la trama de narcotráfico. Uno de ellos va más allá. Aduce que tras pasar 36 horas reparando una avería se sumergió en un profundo sueño durante muchas horas, descubriendo al despertarse los fardos, sin atreverse a preguntar pues sospechó que podía ser alguna sustancia ilegal y temió por su vida. De ahí su inocencia.

La Audiencia de Pontevedra tilda de inverosímil esta versión, y admite que ambos están en su derecho de declarar en su descargo, pero los mantiene en prisión provisional porque como apunta el fiscal "parece que no se puede planear una operación de narcotráfico de estas características (3.000 kilos de coca), con tripulantes que no tengan conocimiento de la finalidad de la travesía.