Otra jornada trágica en las carreteras gallegas. Un conductor de 47 años de edad falleció en un siniestro registrado en la A-52, a la altura del municipio ourensano de Allariz, mientras que una octogenaria murió arrollada por un camión mientras caminaba de madrugada por el medio de la autovía del Barbanza.

El accidente de la A-52 ocurrió a las 10.15 horas de ayer y le costó la vida a Ignacio A.S., vecino de Viana do Bolo. Con él iba su madre, Beatriz S.R., de 81 años, que resultó herida grave. El vehículo en el que viajaban, un Seat León, se salió de la vía, superó el quitamiedos entre la calzada y el arcén y recorrió unos 50 metros hasta que terminó empotrándose contra una pilastra de un puente de paso elevado sobre la autovía. El conductor murió en el acto y su madre, grave, fue trasladada al hospital.

Desorientada

Horas antes, de madrugada, sucedía el siniestro en el Barbanza, en el que pereció una mujer de 85 años, M.M.G. El accidente de tráfico se produjo en la carretera VG1.1 que une Padrón y Rianxo, por donde circulaba, procedente de Ribeira, un camión frigorífico que arrolló a la víctima.

Se desconoce qué hacía a esas horas y en medio de la autovía esta mujer, aunque la primera hipótesis de los investigadores es que estaba desorientada, caminaba sin rumbo y sin ser consciente del peligro que corría al transitar por el medio de una autovía, explicaron fuentes policiales.