Un vecino del municipio ourensano de Calvos de Randín resultó ayer herido muy grave al estallarle un artefacto pirotécnico que, al parecer, estaba manipulando.

La víctima, identificada como J.E.M., de 62 años de edad y natural del lugar de Boborás en el mismo municipio, tuvo que ser evacuada en un helicóptero medicalizado al Policlínico Povisa de Vigo. La aeronave lo recogió en las proximidades del lugar del siniestro y lo trasladó al aeropuerto de Vigo, desde donde una ambulancia medicalizada lo evacuó a la unidad que quemados del centro sanitario vigués.

La explosión tuvo lugar sobre las dos de la tarde. La parroquia de Vila celebraba sus fiestas en honor de Santa Lucía y al concluir la misa se lanzaron unos "foguetes". La víctima lanzó uno de ellos, que le explotó en las manos alcanzándole de lleno en la cara y el torso, según explicó el alcalde de Calvos de Randín, Aquilino Iglesias, que acudió al lugar de los hechos a socorrer al vecino herido.

J.E.M., que durante años fue emigrante en Suiza, presentaba quemaduras en el cuello, la cara y el pecho. Dado que la explosión solo alcanzó al hombre que tiraba los cohetes y no se produjo incendio alguno no fue precisa la colaboración de Protección Civil ni de los bomberos de A Limia, según fuentes de los servicios de emergencias que desconocían lo ocurrido en la pequeña población ourensana que apenas alcanza los 2.000 habitantes.

A última ahora de la tarde de ayer el herido se encontraba en la UCI de la unidad de quemados de Povisa, centro especializado en este tipo de accidentes. Se encontraba grave, aunque estable, según el primer informe médico facilitado a sus allegados.