Un guardia civil que estaba adscrito al puesto de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz) debía ingresar ayer en prisión tras ser condenado por la Audiencia Provincial a 6 años de cárcel y tres de inhabilitación por dos delitos de falsedad documental en documento oficial, al considerar que dos multas que puso en el año 2004 a la ex novia de su hermano eran falsas. El agente pidió el indulto al Consejo de Ministros, que le fue denegado.

La mujer del condenado, Vicenta Sellés, manifestó que "han ido a por él" y calificó los hechos como "algo surrealista", ya que defendió que su marido cuenta con una hoja de servicio "intacta, sin un correctivo ni un arresto". "Ha estado 20 años en el cuerpo de la Guardia Civil, trabajando para su país, se ha jugado la vida por los españoles y ahora le piden 6 años de cárcel por dos multas de tráfico. Es vergonzoso, simplemente han ido a por él", sentenció indignada.

Asimismo, lamentó "el calvario" que están pasando y que ahora se queda "sola" con su hijo, con 421 euros de ayuda familiar y teniendo encima una "enfermedad crónica que a raíz de todo esto ha empeorado".

La esposa del Guardia Civil condenado calificó el juicio celebrado en 2007 contra su marido como "de vergüenza y bochornoso" y señaló que la ex novia del hermano "no presentó testigos ni pruebas y fue sin abogado". Además, calificó de desproporcionada la condena, ya que recordó que hay otro tipo de delitos, incluso de sangre, en donde las condenas son menores.