Los viales gallegos registraron ayer varios accidentes graves, si bien en principio ninguno se saldó con víctimas mortales. En Vigo, un conductor coruñés salvó de vida de madrugada tras salirse de la vía en la avenida de Citroën. El siniestro tuvo lugar pasadas las 5 de la mañana, cuando el Audi A-3 de matrícula de Madrid que conducía colisionó con la rotonda superior de la circunvalación. Inicialmente el coche se fue contra la isleta y salió rebotado a los petriles del paso elevado, quedando volcado sobre un lateral hacia el vacío. El joven quedó aprisionado en el interior del vehículo y los bomberos de Vigo tuvieron que excarcelarlo en una complicada operación de rescate.

El conductor, identificado como R.H.N., de 30 años de edad, fue evacuado al Hospital Xeral, donde al ser requerido para realizar la prueba de alcoholemia se negó, según fuentes de la Policía Local. En principio su estado no revestía gravedad y quedó en observación en el centro sanitario.

También en Vigo, un peatón resultó herido grave sobre las 11.20 horas del lunes, al parecer fuera de un paso de peatones. Se trata de J.M.C.P., de 44 años, que resultó arrollado por una furgoneta en la calle Estrada.

Por otra parte, dos cabos primeros del destacamento militar de La Rubia, en Valladolid, Juan José R.C., de 43 años, y Santiago R.G., de 32 años, resultaron heridos leves ayer tras sufrir un accidente de tráfico. El reventón de una rueda del camión del Ejército en el que se dirigían hacia Figueirido por la autovía A-52, hizo volcar al vehículo según los datos de la Guardia Civil de Tráfico.

El accidente se produjo a las doce menos veinte de la mañana en el kilómetro 206 de la autovía Rías Baixas, A-52, a la altura del término municipal ourensano de Allariz, en dirección a Vigo. En Sanxenxo, una pontevedresa sufrió lesiones graves en una pierna al ser atropellada por un camión que daba marcha atrás.