"Mi hijo es inocente". Dolores Jiménez pronunció ayer esta frase repetidas veces en los juzgados. Esta mujer pudo cruzar unas palabras en los pasillos del juzgado con su hijo Abraham antes de que fuese trasladado al penal de A Lama. "Le dijo a su amigo que se iba a echar la culpa de todo, pero él no lo hizo", insistió ante los periodistas.

La mujer explicó que el otro detenido, Rubén, culpó a su hijo de los hechos alegando que tenía una foto en el teléfono móvil en la que recoge el momento del apuñalamiento. "Dice que es él [en referencia a Abraham], pero no es así", declaró Dolores Jiménez, que, por este motivo, sostiene que hay una tercera persona implicada.

"Si hay una tercera persona, ¿por qué no la buscan?", prosiguió la madre del supuesto autor material de las puñaladas registradas el pasado fin de semana. La mujer afirmó que no cree en la "justicia humana" y precisó que "se sabe" cuando una persona es "inocente" y "noble". Y su hijo, concluyó,

lo es.