Una madre de Oleiros denuncia ante la Guardia Civil la agresión a su hijo con autismo en el colegio

El menor, de 13 años, sufrió contusiones en la cabeza y en una pierna

La progenitora critica que el colegio no activó el protocolo hasta que ella misma acudió a la Inspección educativa, lo que el director niega

El chico tiene “terror” a volver a clase y desde el día de la agresión no acude al colegio

Contusión en la frente que presenta el menor agredido.

Contusión en la frente que presenta el menor agredido. / L.O.C.

Marta Villar

La madre de un niño de 13 años, Natalia Luna, ha presentado denuncia ante la Guardia Civil por la agresión que sufrió su hijo, que sufre autismo leve, por parte de otro compañero el pasado jueves 7 de marzo en el colegio Cristo Rey de Oleiros. Esta progenitora tiene un profundo malestar porque el centro educativo, según afirma, “no activó el protocolo” en estos casos y fue ayer, una vez que ella alertó también a la inspectora de Educación, cuando desde este colegio la convocaron para una reunión mañana miércoles “para iniciar el procedimiento, casi una semana después de la agresión”. El asunto ya está en el juzgado.

Tras contactar con el director del colegio Cristo Rey de Oleiros, afirmó únicamente que “el protocolo” en estos casos de agresiones en centros escolares “se había activado en el tiempo necesario” y que el resto de detalles los podría aportar la Consellería de Educación, al ser un centro privado concertado. Desde este departamento quedaron ayer de explicar próximamente las medidas que se han tomado en este caso.

“Mi hijo tiene diagnosticado autismo muy leve, con discapacidad reconocida. El pasado jueves fui a recogerlo a las cinco de la tarde y noté que cojeaba. Luego ya le vi la cara, hinchada, y la nariz, le pregunté qué había pasado y no me quiso contestar hasta llegar al coche. Tras insistirle mucho, llorando y muy nervioso, me explicó que un compañero le había dado una patada y se había caído al suelo”, explicó Natalia Luna.

El parte médico señala que el menor sufrió un golpe en la cabeza y otro en una pierna, con contusiones para las que recomendó reposo en casa, curas y vigilancia domiciliaria por el trastorno craneoencefálico leve sufrido. Actualmente los signos de la agresión son visibles en una de sus piernas y en la frente, con contusiones ya de color amarillo-violáceo, también en una sien, mientras que también le ha afectado a los ojos al bajar la hinchazón.

Poco después de llegar a casa, según esta madre, una profesora del centro educativo la llamó para decirle que debía llevar a su hijo al médico, que ella había presenciado la agresión, por lo que fue al hospital Quirón. “La agresión se produjo mientras jugaban al fútbol, pero no fue por el juego ni nada de eso, le pegó a propósito. Es un niño que ya hizo otras agresiones. Al llevarlo al Quirón y decirles que le habían pegado, yo no lo sabía, pero tienen orden de denunciarlo. Fui a la Guardia Civil entonces y conté lo que había ocurrido. Estoy muy disgustada, porque yo soy una persona religiosa y por eso elegí este colegio, pero no me gusta su forma de proceder. No me avisaron de lo sucedido, la agresión fue a las dos y media y yo me enteré al ir a recogerlo, no me avisaron. Y no activaron el protocolo hasta que ayer hablé con la inspectora. Ella fue a ver el parte de lo sucedido y vio que el colegio no había hecho ninguno, no había notificado nada. Me contó que ella solo podía levantar acta. Solo quiero que para otros casos no vuelva a pasar lo mismo que con mi hijo”, añade Luna.

Esta madre señala que su hijo en este centro también ha sufrido episodios de acoso. “Se burlan de él, le llaman tonto, le dicen que no sirve para nada”, subraya. El alumno, de trece años y con diagnóstico de autismo, ahora tiene “terror” a volver a clase y desde el día de la agresión no ha vuelto al colegio. “Podía cambiarlo de colegio, pero es que tiene unos amigos estupendos, salvo ese, y además este tipo de niños no toleran bien los cambios. Por eso no quería tomar esta medida. Pero tampoco quiere tolerar, denuncia, la pasividad del centro.

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