Juana Rivas, la madre de Maracena (Granada) condenada a dos años y seis meses de cárcel por la sustracción de sus dos hijos menores en el verano de 2017, ingresó ayer en el centro de inserción social Matilde Cantos de la capital granadina para cumplir la orden de ingreso en prisión.

Pasadas las 10.00 horas, Juana Rivas accedió al centro, emitiendo poco después un comunicado en que reconocía que eran “momentos muy difíciles”, y que consideraba la decisión “muy injusta”, en referencia a la sentencia del Juzgado de lo Penal 1 de Granada, que confirmó el Tribunal Supremo, que a su vez redujo la pena de cinco a dos años y medio de prisión.

“Por supuesto, utilizaremos todas las vías legales para que esta situación dure el menor tiempo posible, especialmente la estimación de nuestro recurso” contra el auto de 27 de mayo de 2021 en que el Juzgado de lo Penal número 1 de Granada acordaba el arresto y entrada en prisión de Rivas, así como “por la clasificación en tercer grado penitenciario y la concesión del indulto total”, indicó por su parte, en un comunicado el despacho de abogados Aránguez, que representa a esta mujer.

Carlos Aránguez, abogado de Juana Rivas, aseguró que su equipo jurídico va a hacer “todo lo posible para que su ingreso sea lo más cómodo y breve posible”.

El letrado explicó que esta vecina de Maracena (Granada) ingresó de forma “voluntaria” en ese establecimiento penitenciario a raíz del auto del Juzgado de lo Penal 1 que ordenó su ingreso en prisión.