El comisario europeo para el Mercado Interior, Thierry Breton, anunció ayer que la Unión Europea no renovará el contrato con la compañía farmacéutica AstraZeneca más allá del mes de junio. Estas declaraciones ratifican una opción que ya estaba sobre la mesa desde que la Comisión Europea presentó el mes pasado una demanda contra la compañía por haber incumplido su compromiso de entregar a los Estados miembros las dosis contratadas de su vacuna contra la COVID-19.

“No vamos a renovar los pedidos después de junio. Veremos qué pasa”, declaró ayer Breton en una entrevista televisiva a France Inter, en la que precisó que esta decisión ha sido tomada “de momento”.

Los problemas de AstraZeneca para cumplir con los repartos estipulados en el contrato con la UE han enfrentado desde hace meses a la compañía con la Comisión Europea. Estaba previsto que durante el primer trimestre del año entregase 120 millones de dosis a los Estados miembros y solo repartió 30 millones. Bruselas llegó a enviar una carta a AstraZeneca para iniciar un procedimiento amistoso de resolución de disputas. Tras constatar que este paso intermedio no facilitaba una solución, el Ejecutivo comunitario tomó la decisión de elevar el asunto a la Justicia belga.

Bretón afirmó que está “absolutamente seguro” de que esos problemas de aprovisionamiento se han terminado y que la UE terminará el año con una capacidad de producir “más de 3.000 millones de vacunas al año”.