El Gobierno ha aprobado un plan contra las noticias falsas, más conocidas como fake news, mediante el cual monitorizará la información y podrá solicitar colaboración a los medios de comunicación para perseguir la “difusión deliberada, a gran escala y sistemática de desinformación, que persiguen influir en la sociedad con fines interesados y espurios”.

La orden, publicada ayer en el Boletín Oficial del Estado y firmada por el Ministerio de Presidencia, que dirige Carmen Calvo, justifica esta decisión en que “uno de los pilares que sustentan a las sociedades democráticas” es el acceso a la información veraz.

El Ejecutivo ha elaborado una estructura compuesta por el Consejo de Seguridad Nacional, el Centro Nacional de Inteligencia (CNI), el Comité de Situación, la Secretaría de Estado de Comunicación, la Comisión Permanente contra la desinformación, las autoridades públicas competentes y, por último, el sector privado y la sociedad civil.

El Gobierno podrá solicitar la colaboración de los medios cuya contribución se considere “oportuna y relevante” para combatir las fake news. En la orden se argumenta que el sector de la comunicación puede contribuir a este objetivo “con acciones como la identificación y no contribución a su difusión”.