Los centros educativos tendrán que realizar una "limpieza y desinfección de las instalaciones por lo menos una vez al día", reforzándola en aquellos espacios que lo precisen en función de la intensidad de uso. Los baños y aseos deberán limpiarse al menos tres veces al día.
Además, se colocará un dispensador de gel desinfectante en todas las aulas, cuyo uso deberá reforzarse con el lavado exhaustivo con agua y jabón.
El protocolo también incluye directrices ante la posible aparición de síntomas en un alumno presente en un centro educativo e indica que la primera medida a tomar será aislar la persona en un espacio separado y facilitarle una máscara quirúrgica hasta que lleguen sus progenitores o tutores.
El espacio ya debe estar previamente identificado y tiene que contar con ventilación idónea y una papelera de pedal con bolsa donde tirar la máscara y pañuelos desechables. Lo mismo ocurrirá con cualquier trabajador del centro en igual situación. La actividad en los institutos dependerá del alumnado que acuda a las clases de refuerzo y cuya incorporación será voluntaria. En Galicia los estudiantes de segundo de Bachillerato ascienden a unos 14.800 alumnos repartidos en 278 centros. En el caso de segundos cursos del grado medio o superior de FP, se realizará un horario de atención presencial.
