Como en las clases presenciales, en la conexión virtual la actitud y disposición del alumno para el aprendizaje también es fundamental y quizás más difícil de controlar (en casa puede haber otras distracciones que, además, el docente desconoce). Juan Sanmartín, profesor de Química, está acostumbrado a utilizar tecnología en sus clases. De hecho es pionero en Galicia en flipped classroom o aula invertida, con la elaboración de vídeos que comparte en la red. Él imparte clase por videoconferencia estos días. "Intento motivarlos y hacerlas atractivas, didácticas y entretenidas", expresa Sanmartín que añade que, como en clase, "es crucial la actitud del alumno". "Sé que en algunas casas sí tienen problemas de cobertura, sobre todo con las videoconferencias. Si algún alumno se la pierde, dejo los ejercicios explicados en la web", puntualiza.