La reciente amenaza del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de subir los impuestos para frenar la entrada de vinos europeos en el país ha calado en el sector vitivinícola gallego. No es para menos, habida cuenta de que casi un 30% de la exportación de vinos de todas las denominaciones de origen de Galicia se dirigen a ese mercado. Y más aún en el caso de los vinos de Rías Baixas, cuyo principal mercado de exportación es, precisamente, EE UU: allí se comercializa una de cada tres botellas que se venden en el exterior de España; es decir, un 32% de las exportaciones totales de Rías Baixas. Las cifras hablan por sí solas. En números representan 2,3 millones de litros exportados en 2018 y 2,4 en 2017, según datos facilitados por la propia D.O.
La siguiente denominación de origen gallega con mayor llegada al mercado norteamericano le sigue de lejos. Para la D.O. de O Ribeiro, Estados Unidos representa el tercer destino en importancia de exportación, luego de Alemania y Reino Unido, pero en factura de botellas es mucho menor: unos 49.329 litros exportados de caldos blancos y tintos de O Ribeiro fueron exportados en 2017 rumbo a EE UU.
La importancia del país norteamericano para el sector vitivinícola gallego queda de manifiesto. Pero, ¿por qué siguen atentos la evolución de la amenaza de Trump? Fuentes de los consejos reguladores aseguran que el tema ya se ha comentado en altas esferas del Ministerio de Asuntos Exteriores y en organismos de Comercio de la Unión Europea. Podría ir en serio el máximo dirigente del gigante americano, lamentan.
"No es una buena noticia para el sector del vino", avanzó el presidente del Consello Regulador de la Denominación de Orixe O Ribeiro, Juan Manuel Casares. "Todo lo que suponga aranceles, impuestos o medidas proteccionistas nos va a perjudicar", avanzó. "Supone incrementar los valores de exportación y, por tanto, nos va a perjudicar siempre". Casares llamó a mantener la calma durante esa tensa espera. Aunque, con cierto humor, el máximo responsable de la D.O. más antigua de Galicia indicó: "Yo llamaría a Trump a probar una copa de Ribeiro, para retarle a que cambie de opinión".
El secretario del Consello Regulador de la Denominación de Orixe Rías Baixas, Ramón Huidobro, valoró a FARO la amenaza de Trump de vuelta de un viaje a Japón. Y para ello tiró de memoria histórica. Hasta el reciente desbloqueo del acuerdo entre Mercosur y la Unión Europea, la importación de vinos europeos llegó a estar gravado con aranceles de importación del 27%.
"Eso mismo ocurrió cuando el presidente de Brasil dijo que ya estaba bien de comprar vinos europeos, que hacían competencia a los suyos; un mercado que estaba creciendo", explica Huidobro. "¿Y qué pasó en Brasil?", prosigue, "pues que se logró que los brasileiros dejaran de consumir vino; no de consumir vinos europeos, sino todos los vinos, porque los de Mercosur no llegaban a la calidad exigida por el consumidor, así que se desbarató un mercado incipiente de distribución y una industria vitivinícola que se estaba creando", concluye. "Eso mismo le puede pasar a los americanos", alerta el secretario de Rías Baixas.
No son momentos de tranquilidad, precisamente, para el sector gallego. Y es que a la amenaza de EE UU se une otro frente que genera cierta incerteza. Las exportaciones de vinos gallegos al Reino Unido representan un 17% del total y el panorama del Brexit tampoco parece alentador. Es decir, los principales mercados de destino de las cinco D.O. de Galicia son Reino Unido y Estados Unidos. En el caso de O Ribeiro, se trata de su segundo destino en orden de importancia.
