Una sonrisa se esboza en la cara del sector de la moda en Galicia. Una mejora en el consumo estatal y un incremento vertiginoso del 12% de las exportaciones entre enero y junio de este año, según datos del Instituto Español de Comercio Exterior (ICEX), lo explican. En los últimos años, numerosas firmas han quedado por el camino -una de las renuncias más recientes e hirientes, la de la marca coruñesa Viriato- y las que han resistido o eclosionado hace poco empiezan a levantar los dedos con el símbolo de la victoria. Sin confiarse, pelean por mantener compradores y lograr otros nuevos. Con este fin, trabajan, desde ayer, un total de 17 empresas gallegas (nueve de A Coruña y ocho de Pontevedra) en el Salón Internacional de Moda Momad Metrópolis de Madrid y también un puñado en la CPM de Moscú donde presentan sus colecciones para la próxima primavera-verano.
Durante las primeras horas de apertura del salón madrileño, el más importante del mercado ibérico, marcas gallegas como Oky, Olga Santoni o Sabay Clothing respiraban con ilusión ante el goteo continuo de potenciales clientes y el reencuentro de otros con intenciones más que claras de reservar la nueva colección.
"Otros años, tenía un visitante cada cuarto de hora, ahora llegan cada 5 minutos", confesaba exultante la viguesa Olga Santoni. "Hemos venido a Madrid con mucha fuerza y ganas porque la presentación de la colección en otros lugares como Alemania o Rusia ha funcionado muy bien", añadió.
Su propuesta se asienta en tejidos como la viscosa, lino y algodón, el efecto crochet, estampados frescos y el "hecho a mano" con dibujos de cristal de swarovski. Para el próximo estío, ponchos y túnicas fluidas de inspiración safari; vestidos largos y vaporosos; monos monocolor con adornos en oro; chalecos-joya; colores como el azul turquesa, el marino, verde lima y blanco.
En el caso de Olga Santoni, Momad sirve para ampliar negocio en España pero también para expandir su red ya presente en países como Líbano, Italia, Portugal o Hong Kong, además de México. No obstante, la inundación del Aeropuerto Internacional de Ciudad de México y la suspensión el jueves de las operaciones aéreas por las tormentas Lidia y Harvey, impidió a compradores mexicanos llegar ayer a la apertura de la feria.
Otras firmas como Oky (anteriormente Oky Coky), uno de los "grandes" nombres de la cita, según la organización) acuden al Momad con la expectativa de "seguir reafirmando nuestros vínculos con el mercado nacional y captar nuevos clientes. Para nosotros, es una feria de carácter nacional", explicaba a este diario Sandro Portela, director general de la marca viguesa.
Un horizonte "más animado"
A pocas horas tras la apertura, opinaba que "está siendo más animada que la campaña anterior. Hay más captación de nuevos clientes, gente que abre nuevas tiendas de moda porque ve negocio en el sector. Ven que hay público que agradece no encontrar la misma prenda en Galicia que en Singapur. Nuestro objetivo son tiendas multimarca que quieren vender prendas diferentes a las de la tienda de al lado o de la ciudad más próxima"
La clave, para Portela, reside en la mejora de la economía y la apuesta de consumidores por prendas "con precios más elevados" que los de las cadenas low cost y de producción rápida. "Nos ha costado mucho -señalaba ayer- seguir defendiendo el estándar de calidad pero la gente vuelve a apreciarlo". Las fotos de la campaña del próximo verano lo demuestran con prendas en las que los estilos se fusionan en colores vibrantes matizados por los clásicos blanco, crudo, negro y arena, además de estampados.
Para Oky, el verano de 2018 se puede vestir con prendas ceñidas (faldas tubo, pantalones apretados) o con vestidos fluidos. La firma apuesta por las superposiciones, volantes posicionados, lazos, botonaduras joya, hombros descubiertos... En el caso de la colección "event" (para eventos especiales), prendas en blanco, crudo, dorado y en menor medida, negro, con mangas ángel, volantes en bajos y mangas.
Además de estar presente en el Momad de Madrid, Oky también se promociona este fin de semana en la feria CPM de Moscú, una puerta abierta al mercado del Este. La capital rusa es una cita obligada en cada temporada para esta firma olívica que ya ha presentado la colección primavera-verano en Londres y Berlín y que declina acudir este septiembre a París. "La feria francesa será más tardía y no acudimos porque en la fecha en la que se celebrará habrá pocos compradores internacionales. Estos empezaron a adquirir prendas en julio y agosto", por lo que a mediados de septiembre "ya tienen agotados sus presupuestos de compra", detalló.
Frente a la experimentada Oky, una firma gallega con recorrido más corto (solo cuatro ediciones) en el Momad es la viguesa Sabay Clothing, de la diseñadora Eva Rodríguez. Su colección, "Monos", la presentaba destacando que "los estampados -de monos, frutas, flores...- los hacemos nosotros en talleres de Vigo donde se realiza el corte y la confección, apostando por faldas plisadas; o plisados en pecho y fondos de vestidos". Rodríguez destacó que el elegir talleres gallegos supone presentar "prendas muy bien rematadas, que sientan bien". En su caso, acudir al Momad es necesario para darse a conocer a pesar del alto precio del estand, unos 5.000 euros por tres días de feria.
