Un arduo proceso selectivo durante el que consiguió destacar entre más de 2.000 aspirantes le ha llevado hasta El Cairo con una cotizadísima beca del ICEX. Juan Fuentes (Vigo, 1989) forma parte del 10% de talentos elegidos para cursar un máster en Gestión Internacional de la Empresa, en su caso, en la Universidad Internacional Menéndez Pelayo, y ser destinado durante un año a una de las oficinas comerciales de las embajadas españolas. "A mí me tocó Egipto, llegué en enero y me está cambiando la perspectiva vital. El contraste es tan grande que tu forma de pensar se transforma. Mi familia y mis amigos me dicen que he evolucionado. Estoy contentísimo", reconoce.
Acabó Derecho en Santiago un año antes y con premio extraordinario tras realizar sendas estancias en Budapest y la Autónoma de Madrid: "Descubrí a gente tan increíble que me dije que tenía que ponerme las pilas para poder trabajar en el mercado internacional. Rodearte de gente mejor te motiva".
Trabajó en oficinas del BBVA y en Cuatrecasas, además de ser voluntario de la Cruz Roja, y en la universidad madrileña puso en marcha y fue vicepresidente de una de las asociaciones modelo que la ONU tiene repartidas por el mundo. "Tengo pasión por aprender y no solo de los maestros o de la gente que admiras. Todo el mundo tiene una historia increíble", sostiene.
En la Embajada de El Cairo realiza estudios económicos y presta asesoramiento comercial y legal a empresas españolas que ya están presentes en Egipto o exploran posibilidades. "La Primavera Árabe de 2010 supuso una convulsión en las inversiones y todavía hay cierto miedo, pero la situación comienza a estabilizarse y las perspectivas son buenas. El mercado africano es el futuro, es amplísimo y está en crecimiento. Faltan muchas empresas españolas por venir y Egipto es el país clave para entrar en este continente y en Oriente Medio", destaca.
Inditex y las empresas de pescado congelado y conserveras ya están allí. Juan, que estudió árabe durante el año de máster y continúa perfeccionándolo, fue capaz de traducir la marca Calvo en un estante del supermercado. "Orgullosísimo de Vigo y de Bouzas, compré 4 latas para mis compañeros de piso, que son de Alemania, Jordania e Italia. Allí donde voy presumo de ser gallego y enseño a todo el mundo la playa de Rodas", relata divertido.
Durante el máster también realizó un curso optativo sobre tecnologías de la información y la comunicación en empresas e instituciones, de forma que ahora también es el responsable en esta materia en El Cairo y en Beirut.
"Pienso que en el mundo laboral hay dos perfiles: el especialista y el generalista. A mí me encanta el segundo, porque me gusta tener una idea global de cómo funciona una organización o una empresa", explica.
Juan admite que el destino que le asignó el ICEX le generó ciertas reservas en un primer momento: "El mundo árabe está en el punto de mira de todos los medios, pero el problema del terrorismo solo está relacionado con los islamistas, un porcentaje mínimo de la población. El 99% de la gente es espectacular. Me he encontrado con una calidad humana y una hospitalidad que no había visto en ninguna parte del mundo".
Y como ejemplo, Juan relata la anécdota vivida con una niña que pedía en la calle a la que regaló una chocolatina: "Empezó a perseguirme y un señor me explicó que lo hacía porque quería compartirla conmigo. Yo comparo Egipto con el mundo en que vivimos, no hay clase media, solo países ricos y pobres. Trabajar en la embajada me permite relacionarme con personalidades importantes pero también me gusta hablar con la gente de la calle. El otro día pude escuchar al historia de un refugiado sirio en Beirut. Eso no lo aprendes en ninguna universidad. Y tampoco había estado antes con gente de tantos países diferentes", subraya.
La beca ICEX se completa con un segundo año de prácticas en una empresa o un organismo internacional. A Juan le gustaría continuar en el extranjero o trasladarse a una compañía gallega para la que tuviese que viajar a otros países a menudo.
Por si su currículo todavía no fuese lo bastante atractivo, el vigués es profesor en la Universidad Americana de El Cairo, una de las mejores del mundo árabe y en la que imparte conocimientos del mercado y la cultura española y latinoamericana a arquitectos, economistas o filólogos. "Soy una persona proactiva y lo que hago de lunes a viernes me ayuda a preparar mis clases del sábado. La información y las relaciones son claves. Enviar currículos desde tu ordenador no sirve para nada, tienes que salir a la calle", aconseja.
El vigués también coordina un grupo de investigadores auspiciados por el Consejo de Europa para analizar si las legislaciones aprobabas en nuestro país a raíz de la crisis incumplen la Carta Social de la UE: "Los resultados se publicarán en unas semanas y serán expuestos en Bruselas. Es un estudio totalmente imparcial e independiente y sí se demuestra que España ha vulnerado derechos sociales con algunas leyes".
