"Cuando deje de llover", un potente drama familiar, se convirtió ayer en la protagonista de los "Premios Max" al llevarse la deseada manzana en tres categorías: mejor espectáculo de teatro; mejor dirección de escena, para Julián Fuentes; y mejor actriz de reparto, para Susi Sánchez. Lo hizo en una gala, la número 18, llena de mensajes reivindicativos y en la que la tónica general fueron los premios muy repartidos.

La cita, que organiza la SGAE y se celebró en la sala Barts de Barcelona, rindió homenaje a las grandes actrices españolas de todos los tiempos bajo el título "A nuestras queridas cómicas". Los números musicales sirvieron para arrancar la emoción, como el vals por los fallecidos de este año relacionados con el mundo de las artes escénicas, y para lanzar las críticas más agudas hacia el Gobierno y sus políticas. Las referencias al IVA cultural del 21% fueron constantes; desde los 21 segundos de silencio que pidió Loles León por "ese número que ha producido tanto daño a esta maltrecha cultura", hasta el discurso del presidente del jurado, que comenzó a través de un plasma, en honor a las ruedas de prensa del Presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. "Ahora sí me siento presidente", bromeó.

El público lanzó grandes ovaciones en varios momentos, pero se levantó por completo para recibir a Rosa María Sardá, "Premio Max de honor" de este año. "Quieren dejarnos con el culo al aire, pero no lo van a conseguir. Los políticos pasan, pero nosotros seguiremos siendo actores incluso después de morir", dijo la actriz homenajeada. Al tiempo que recordó que "un pueblo que no apuesta por su teatro es un pueblo muerto, y nosotros no vamos a dejar morir al nuestro".

Los otros dos títulos que se fueron ayer satisfechos con dos "Max" cada uno fueron "El triángulo azul" y "Fausto". El primero se quedó con las categorías de mejor autoría teatral, para Laila Ripoll y Mariano Llorente; se alzó con el "Max" a mejor diseño de vestuario, para Felype de Lima, y mejor diseño de iluminación para Juan Gómez-Cornejo.

Lluís Homar se coronó como el mejor actor protagonista por su interpretación en "Terra Baixa i Lluís Homar", y Blanca Portillo como mejor actriz protagonista por "El testamento de María". La actriz lanzó un mensaje a favor de las mujeres, "que luchamos en la oscuridad aunque no nos dejen"; y dedicó el premio al público, "que está por encima de leyes absurdas e historias políticas". Pepón Nieto se llevó el "Max" a mejor actor de reparto por "El Eneuco".

La obra "Bobas y gallegas", de la compañía Mofa y Befa, dirigida por Quico Cadaval, optaba al mejor diseño de espacio escénico,por el trabajo realizado por Baltasar Patiño, quien finalmente no consiguió el galardón que fue a parar al trabajo de Arturo Martín en la obra "Fausto".