Psicólogos gallegos consultados sobre esta medida aplauden su intención para proteger a los menores de la violencia y porque permitirá trabajar con ellos a diferentes niveles -psicológico y educativo- y no solo con las mujeres.

La reivindicación de que los hijos de mujeres maltratadas por sus parejas o exparejas sean víctimas directas es una reivindicación de los sectores implicados con mediación familiar y menores. Ahora el PP pretende reformar la ley aprobada en 2004, y cuyo objeto es actuar contra la violencia "como manifestación de la discriminación, la situación de desigualdad y las relaciones de poder de los hombres sobre las mujeres".