Los restos de Pablo Neruda serán exhumados por segunda vez tras su muerte en septiembre de 1973, pocos días del golpe militar, por decisión del juez chileno que investiga si el premio Nobel de Literatura fue asesinado. La exhumación, según confirmaron fuentes próximas a la investigación, fue ordenada por el juez Mario Carroza, que está a cargo del sumario abierto tras la denuncia por homicidio presentada por el Partido Comunista de Chile, al cual pertenecía el autor de "Canto General".

Hasta comienzos de 2011, la versión oficial sobre la muerte de Neruda, ocurrida el 23 de septiembre de 1973, era que se debió a un cáncer de próstata. Pero en mayo de ese año, su antiguo chófer, Manuel Araya, denunció que el autor de "Veinte poemas de amor y una canción desesperada" recibió una inyección letal en el hospital donde estaba internado, lo que suscitó la sospecha de que podía haber sido asesinado por el régimen del general Augusto Pinochet.

La denuncia motivó que el Partido Comunista, a cuyo comité central pertenecía Pablo Neruda, presentara una denuncia que fue admitida por la justicia chilena, con lo que se abrió así una investigación sobre su muerte.En la querella además se solicitaba además la exhumación de los restos del Nobel de Literatura, para verificar si fue envenenado.

En septiembre del año pasado, el juez Carroza encargó nuevos peritajes a expertos de la Universidad de Chile para determinar si era necesario ordenar la exhumación de Neruda para esclarecer la causa de su muerte.

Poco días antes se había conocido un informe del Servicio Médico Legal que apuntaba al cáncer de próstata que el ganador del Premio Nobel de Literatura 1971 padecía como la más probable causa de su muerte, de la que ahora se cumplen 40 años.

Dicho informe reducía además las expectativas de éxito de una eventual exhumación debida a elevada humedad del terreno en que actualmente está sepultado Neruda.