Europa Press / NUEVA YORK

Los temores a que pudiera repetirse la suerte de su gemelo el "Columbia" se disiparon la pasada madrugada (en el Este de EEUU) cuando el "Discovery" finalmente tomó tierra en la Base de la Fuerza Aérea de Edwards en California, disipando cualquier duda sobre la efectividad de las reparaciones llevadas a cabo en el espacio, pero abriendo la incógnita de si los técnicos del programa podrán solucionar la causa de los desprendimientos de aislante del tanque principal de combustible.

La misión de 14 días ha sido seguida casi minuto a minuto con gran atención, no sólo desde el Centro Espacial Kennedy, sino por la audiencia estadounidense. El temor a un nuevo desastre, que surgió tras conocerse la existencia de desperfectos ocurridos tras el despegue, marcó la atención de medios, especialistas y seguidores del programa espacial de transbordadores.

Ha sido "una misión fantástica", afirmó minutos después de aterrizar el vehículo en Edwards la comandante de la misión, Eileen Collins, añadiendo lo feliz que se sentía de regresar y poder decir que había sido un éxito. Tanto ella como el resto de la tripulación del "Discovery" aseguraron estar ansiosos de poder ver el transbordador en tierra y observar el estado del mismo tras las repaciones realizadas.

Sin embargo, la llegada a la tierra del transbordador no ha sido un paseo sin incidentes ya que la fecha inicial prevista para anteayer se vio abortada por el mal tiempo y la de ayer otras dos veces, ya que las condiciones me- teorológicas en la base de Cabo Cañaveral desaconsejaban el aterrizaje. A las 5.05 horas, el Control de la Misión decidió suspender la última intentona sobre el Centro Espacial Kennedy, optando por aterrizar en Edwards.

A las 7.06 horas el "Discovery", situado sobre el Océano Indico y a una altitud aproximada de 354 kilómetros, activó el encendido de los motores que durante dos minutos y 42 segundos le desplazaron de su órbita alrededor de la Tierra, situándolo en una trayectoria hacia la Base Edwards, programada para las 8.12 horas.

Volando a una velocidad equivalente a 17 veces la del sonido, el "Discovery" fue reduciendo gradualmente su velocidad en la reentrada de 27.353 kilómetros por hora a 11.906 kilómetros por hora cuando se encontraba a 217 kilómetros de Edwards, 5.185 metros de altura y a ocho minutos de tomar tierra.

El proceso de transición de aerofrenado utilizando la resistencia de la atmósfera terrestre generó temperaturas de hasta 1.300 grados centígrados. Cualquier desperfecto en la cubierta térmica hubiera causado un desastre como ocurrió hace dos años y medio en febrero de 2003, cuando el "Columbia" se desintegró en la fase de reentrada.

Oficialmente, el Discovery tomó tierra a las 5.11horas -las 14.11 en España-. El Centro Espacial Johnson en Houston (Texas) emitió su mensaje de bienvenida un minuto más tarde, una vez que el "Discovery" paró totalmente y se constató que la nave y su tripulación a bordo ya estaban de regreso y a salvo en la Tierra.