Emocionada durante la apertura del curso de la RAGC por el acto de homenaje a Viéitez, ya que había sido su profesor en la facultad de Biología y "muy amigo de mi padre, que aún vive", aseguró. La catedrática y experta en acuicultura de Pontevedra, Alicia C. Estévez, asegura "ya era hora de que entrasen mujeres".
"Soy miembro de la Unidad 'Muller e Ciencia' de la Xunta y creo que la mujer tiene que estar representada en todos los ámbitos. De hecho, hay muchas científicas que tendrían que haber entrado antes en la Academia. Pero la institución debe abrirse también a los jóvenes. No hace falta a veces culminar la vida científica", sostuvo la profesora.
Su investigación se encuadra en el campo de la Biotecnología, más concretamente en el estudio de patologías de pescados y la elaboración de vacunas para acuicultura, tras estudiar en la Universidad de Maryland y Oregon (EE UU) y regresar a España en 1981. Vivió lo que considera como la "explosión" del sector en Galicia, a partir de 1984. Estévez tiene siete patentes registradas, relacionadas con vacunas para peces de agua dulce y salada. "Buscamos que el pez pueda llegar a la talla comercial sin ninguna enfermedad", explica la experta. Han estudiado qué enfermedades tienen más afectación económica en la producción de rodaballos y lenguados, actualmente. "Que tengan un calendario vacunal, al igual que los niños", compara la experta.
En lo tocante a la nueva etapa como académica, considera su propuesta para ingresar en la RAGC "un orgullo; un premio más en la carrera investigadora". En los últimos diez años dirigió 16 tesis doctorales, publicó un libro, 30 capítulos y 132 trabajos de investigación. Además, en 1993 fue merecedora del Premio Jaime Ferrán en la categoría de investigadores, que otrga la Sociedad Española de Microbiología.
