La Concellería de Obras Urbanas de Pontevedra continúa con las obras de reforma de la calle Loureiro Crespo, que la próxima semana entra en su primera fase, después de finalizar los trabajos preliminares. Este avance obliga al cierre de la calle entre el tramo de Casimiro Gómez y Gonzalo Gallas, con el fin de acelerar al máximo el desarrollo de la obra, tal y como se comprometió el concejal Demetrio Gómez con vecinos y comerciantes en la videoconferencia realizada hace dos semanas.

Además de trasladar el estacionamiento de taxis a la calle Cobián Areal, se crea una zona de servicios en la calle Gonzalo Gallas para atender a los establecimientos comerciales de la zona, así como a la demanda del hospital, ya que una de las prioridades es mantener la actividad económica.

Esta medida obliga a la inversión de Gonzalo Gallas, que permitirá un acceso rápido a las urgencias pediátricas y facilitar el acceso al aparcamiento y a la zona de servicios de la calle Antón Fraguas.

La modificación del tráfico se mantendrá hasta el final de esta primera fase de la reforma. La actuación en este tramo consiste en la demolición de la acera del lado derecho para la instalación de los servicios soterrados y, a continuación, su pavimentado con hormigón. Luego se abrirá el lado izquierdo para seguir el mismo procedimiento que en el derecho.

Otero Pedrayo

Por otra parte, el Concello de Pontevedra ha cerrado al tráfico la Rúa Otero Pedrayo por seguridad, ante un posible derrumbe de un talud hacia la estación de autobuses. Este incidente está relacionado con las obras de excavación relacionadas con la creación de la nueva estación intermodal. Una vez que se consolide el subsuelo, se podrá abrir dentro de 15 días.

Otero Pedrayo ya disponía de un carril de tráfico cerrado debido a las obras de la estación. Estaba permitido el tránsito desde la zona de Conde Bugallal y O Marco hacia el centro de la ciudad, pero debido al incidente ocurrido, es preciso cerrar, también, este sentido de circulación, según informó el Concello.

La calle quedó cerrada el pasado martes y después de ser analizada por los técnicos municipales, se hace preciso reforzar el subsuelo de la calle antes de proceder su apertura.

Por lo tanto, se prevé que el cierre de Otero Pedrayo se prolongue durante 15 días. Para atender las necesidades de tráfico de la zona, la Policía Local articuló un plan de movilidad con la propuesta de que los accesos y salida de la ciudad hacia el sur se hagan, bien a través de la calle Josefina Arruti o bien hacia Conde Bugallal.