El siniestro provocó importantes retenciones en la AP-9 en dirección Vigo, pues tras el mortal atropello varios vehículos chocaron al intentar esquivar a la víctima, quedando parados en medio del vial.

Los agentes de la Guardia Civil se vieron obligados a cortar los dos carriles de la AP-9 y trabajaron junto a los efectivos de bomberos y la Policía Local para tratar de restablecer el orden en la zona.

En el entorno de las 20 horas continuaban con estos trabajos. No fue hasta más tarde cuando habilitaron un carril provisional para aliviar la congestión de tráfico producida por el incidente en la autopista a su paso por Pontevedra.

Se desconocen las causas por las que el hombre cruzaba a pie por la AP-9, una carretera en la que no está permitido el acceso a los peatones. Por otra parte, en la investigación abierta por las fuerzas del orden, el análisis de las huellas dactilares será clave para lograr esclarecer quién es el fallecido.