Los desprendimientos de piedras sobre la calle Illa de Tambo se deben a la obra por la que se descubrirán las tuberías del servicio de agua para instalar en la finca municipal, de fuerte pendiente y de donde proceden los peñascos, donde se instalarán unas válvulas de cierre del suministro de agua.

Así lo explicaba el alcalde de Poio, Luciano Sobral, tras ser preguntado sobre los desprendimientos. El regidor destacó que el cierre de ese tramo de la calle se hace por motivos de seguridad para ejecutar la obra de mejora que permitirá retener el agua que se bombea al depósito. Además, adelantó que los técnicos siguen trabajando en el proyecto por el que se reconstruirá el depósito afectado por el derribo del techo en el mes de mayo.