El ramal ferroviario al Puerto de Marín, puesto en servicio hace diecisiete años, se ha convertido en uno de los más utilizados en la red de Puertos de Interés General del Estado, ya que mueve el 15% de todas las mercancías que pasan por los muelles marinenses, pero aún así, el uso de los camiones, para el transporte por carretera, es todavía mayoritario en estas instalaciones.
La memoria de actividad del pasado año, que acaba de hacer pública la Autoridad Portuaria, señala que en todo 2018 circularon por este ramal un total de 14.614 vagones -aunque cerca de la mitad lo hicieron vacíos- lo que supone una media mensual de más de 1.200.
Estos trenes, que atraviesan prácticamente a diario la plaza de Placeres, movieron un total de 369.423 toneladas de mercancías, el 15% de los más de 2,5 millones de todos los productos estibados en el puerto. Se sitúa entre las cifras más altas de los últimos años, solo superada por las 421.000 toneladas de 2015 o las 375.000 de 2016, pero supone un salto cuantitativo con respecto a lo que se transportaba por tren hace una década, cuando apenas se llegada a 700 vagones al mes y menos de 230.000 toneladas.
En todo caso, el ferrocarril continúa siendo un tipo de tráfico menor con respecto a los camiones, pese a que a finales del pasado año se incorporaron los contenedores a la actividad ferroviaria, hasta ahora dominada casi en exclusiva por los piensos y graneles. Se da la circunstancia de que la totalidad de mercancías trasladadas en tren fue de entrada, es decir, desembarcadas en los muelles y cargadas después en los vagones para su desplazamiento fuera del puerto.
La carretera sigue siendo la vía de comunicación más utilizada, ya que los camiones transportaron el pasado año haya 2.105.594 toneladas, con más de 124.000 camiones registrados en las entradas y salidas del puerto. Esto supone una media mensual de más de 10.300 vehículos pesados, ocho veces más que el número de vagones. En este caso hay un reparto más equilibrado entre productos embarcados (871.000 toneladas) y descargados, que sumaron 1,2 millones de toneladas.
El resto de tráficos (apenas unas 75.000 toneladas) se mueve por vía marítima interior, ya que el recinto marinense carece de tuberías u otros sistemas. Productos pesqueros y avituallamiento conforman la mayor parte de la actividad de este movimiento interior.
La propia memoria destaca que "el puerto está unido con la zona sur de Pontevedra a través de una autovía de circunvalación. Para mejorar la conexión del vial portuario con la autovía se dispone de un enlace a la altura de la entrada principal nordeste. Dicho enlace permite la no interferencia entre los tráficos locales y portuarios, agilizando las incorporaciones tanto al puerto como a la autovía". Añade que "a partir del nudo sur de Pontevedra se conecta con la autovía de circunvalación sur, que enlaza con la autopista A-9, con el casco urbano de Pontevedra y su estación de ferrocarril y con la N-550".
Dentro del recinto portuario, "el vial principal del puerto discurre paralelo a su cerramiento entre las dos entradas principales. La primera entrada principal se encuentra en el extremo nordeste del puerto, que es la entrada próxima a Pontevedra. La segunda entrada principal se encuentra en el extremo suroeste siendo la más próxima al centro de Marín".
Se destaca en el informe que "se dispone de conexión ferroviaria directa con la Estación de Adif de Pontevedra" y la "red ferroviaria interior del Puerto dispone de 7.040 metros de vías en las que se posibilitan zonas de maniobras de composición ferroviarias y carga y descarga de mercancías, tanto en primera linea de muelles como en las proximidades de las instalaciones de almacenamiento".
