La escuela infantil Abrente, de Portonovo, practica la lectura de cuentos, en un tiempo en el que los niños cada día están más acostumbrados a las pantallas. Una de las prioridades del centro es fomentar la lectura, y para ello crean una sala de lectura llena de cojines, mantas, alfombras y muñecos, y sobre todo, cuentos. Además de la propia biblioteca, cada niño trajode casa su cuentos favorito.