Técnicos en emergencias sanitarias de la asociación Asgate tacharon ayer de insuficiente el dispositivo municipal organizado para los días de "peñas" en Pontevedra, aquellos en los que se celebran corridas de toros y en los que los jóvenes salen en masa a beber a la calle. En este sentido, recordaron que es una responsabilidad del gobierno local la contratación de ambulancias para evitar llamadas al 061 que dejarán sin este servicio al resto de vecinos de Pontevedra que no participan en este botellón al aire libre, así como a los demás municipios de la comarca.

Tradicionalmente, los jóvenes beben en la calle durante las Festas da Peregrina y coincidiendo con las tardes en las que se celebran corridas en la plaza de toros. Son las mal llamadas "peñas", ya que ni siquiera asisten al coso, pero que se han convertido en una cita ineludible en el mes de agosto. Esos días se producen numerosos casos de intoxicaciones etílicas y otros incidentes, por lo que el Concello organiza un dispositivo especial de seguridad y emergencias.

Según la información facilitada por José Iglesias, vicepresidente de la Asociación Galega de Técnicos en Emerxencias Sanitarias, Asgate, mañana sábado solo habrá una ambulancia contratada por el Concello en la Praza de España entre las 18 horas del sábado y las 2 de la madrugada del domingo. Al día siguiente a esa se unirá otra, en la Plaza de Toros, entre las 17 y las 00 horas. En cuanto al resto de días, el viernes 10 de agosto volverá a ser una sola ambulancia, aunque el 11 y el 12, días grandes de las Festas da Peregrina, ya serán tres.

Iglesias recordó que se tienen dado hasta 40 asistencias diarias entre las ambulancias de Cruz Roja contratadas y el 061 y que se han encontrado casos de menores de 13 años.

"No hay recursos, es un escándalo", se lamentó. En esta línea, puso como ejemplo a ciudades como A Coruña en las pasadas fiestas de San Xoán en Riazor, donde se instalaron tres hospitales de campaña y actuaron más de 40 ambulancias.

La propuesta de Asgate para Pontevedra se centra en la instalación de un hospital de campaña en la "zona cero" del botellón, en la Avenida de Santa María. "Creemos que sería una medida acertada en la que se podría asistir in situ algunas posibles patologías y no derivarlas a ningún centro sanitario", destacan los técnicos.

Por otro lado, consideran que se deben contratar "tres ambulancias más a mayores de la única que va a estar cubriendo peñas" para aliviar a las del 061, "que tienen que dar cobertura a diez ayuntamientos de noche".

Asimismo, proponen que el botellón de peñas se traslade al actual "botellódromo", en el Pazo da Cultura, "ya que allí no tendría tanta repercusión negativa en la ciudad, los locales de hostelería y la imagen de Pontevedra". En este sentido, apuntan que así se daría mejor cobertura a las posibles incidencias al estar concentradas.

"No creemos que un botellón ante una residencia geriátrica, en la Avenida de Santa María, sea el mejor lugar", añaden.

Crítica del PP

Los técnicos en emergencias sanitarias estuvieron acompañados ayer en rueda de prensa por el concelleiro popular César Abal, que criticó que "el corazón de Pontevedra se convierta en un botellódromo" precisamente en las fiestas más importantes de la ciudad.

Abal destacó que en estas fechas, en las que la Boa Vila es visitada por numerosos turistas, se da una imagen "incorrecta" de Pontevedra.

Asimismo, lamentó que el sector de la hostelería se vea afectado económicamente por este tipo de celebraciones. "El BNG organiza alternativas de ocio durante el resto del año para los jóvenes, pero en esos días no, la única opción es beber sin más", dijo.