-Incide siempre que puede en el objetivo del empleo y en ese asunto siempre está el debate sobre Ence. ¿Cuál es su opinión?

-A día de hoy Ence cumple con todas las normativas gallegas, nacionales y europeas, que son muy estrictas. En este momento, no hay ningún criterio más que el político para que se vaya de la ría. Si me preguntan si Ence hizo daño a Pontevedra, respondo que muchísimo. Los primeros años fue un destrozo, pero en este momento el problema de la ría no es Ence y lo sabe todo el mundo. Además, Ence da muchísimo empleo directo e indirecto a Pontevedra. Ya no tenemos empresas que quieran venir como para echar las pocas que tenemos. Mientras cumpla con los criterios que marca Europa, no tenemos nada que decir.

-El modelo de ciudad del que presume el BNG le ha valido hasta ahora a Lores

-Es verdad. Si se vota al BNG de Lores van a tener una Pontevedra bonita, pero si votan al PP de Rafa Domínguez no solo ese modelo va a seguir, sino que habrá un proyecto. Aparte de bonita, vamos a darle contenido, vamos a facilitar la implantación de empresas, para que la gente invierta en Pontevedra, para que haya oportunidades. Todo lo que ayude a crecer económicamente será bienvenido, pero no debemos olvidad que los pontevedreses tienen un modelo ampliamente aceptado, del que todos disfrutamos y hay que mantenerlo, pero eso hay que completarlo con un proyecto económico, que es el gran debe de Lores en los últimos años

-Es decir, que el modelo urbano ya deja de ser el caballo de batalla del PP. Dan por perdida esa guerra.

-Es que este modelo ya no es de Lores, es de todos los pontevedreses. Está aceptado por todos. ¿Cómo no va a continuar la Feira Franca? Eso está superado e ir en contra de eso es ir en contra de Pontevedra.

-Precisamente ese concepto de pontevedresismo ¿lo trata de explotar?

-Mi único interés es Pontevedra, y lo digo de corazón, no porque haya nacido aquí. Trabajo aquí, disfruto de la ciudad todos los días con mi familia.

-¿Es un caladero de votos que habían perdido?

No es eso. Es una realidad. La gente sabe que voy a trabajar por Pontevedra y hay cosas que se pueden mejorar. No es localismo.