El comisario europeo de Medio Ambiente, Karmenu Vella, analizaba y emitía otras dos respuestas en relación con sendas situaciones controvertidas que afectan a la ciudad de Pontevedra. Una de ellas en contestación a una pregunta del eurodiputado Josu Juaristi (de EH Bildu e integrado en el Grupo de la Izquierda Unitaria Europea) en la que preguntaba sobre la prórroga de Ence. Una prórroga que el eurodiputado tildaba en su pregunta de "corrupta y fatídica" y aseguraba que entraba en contradicción con la legislación europea. Y lo hacía al hacerse eco de las denuncias de la APDR y los supuestos incumplimientos en materia de vertidos que denuncia este colectivo y que niegan la fábrica y la Xunta.
La Comisión Europea, a través de Vella, se limita en su respuesta a recodar las directivas que debe cumplir dicha instalación industrial y que en el caso de que las aguas residuales de la fábrica de pasta de papel se viertan a través de una instalación de tratamiento de aguas residuales urbanas, se aplicarán las disposiciones de la directiva referida a tratamiento de aguas residuales urbanas (algo en lo que insiste la APDR desde hace tiempo). De no ser así, es de aplicación la directiva que regula el vertido de aguas residuales para este tipo de instalaciones y para la que se establecieron nuevos parámetros el 30 de septiembre de 2014. En cuatro años desde esa fecha todas las fábricas deberán ajustarse a emisiones por debajo de los nuevos máximos establecidos.
En cualquier caso, incide en que son "los órganos administrativos o judiciales nacionales encargados de la ejecución de las directivas mencionadas los principales responsables de comprobar" situaciones específicas de incumplimiento y "los que disponen de los medios adecuados para resolver el problema si las preocupaciones son justificadas".
Vella también deja en manos de las autoridades españolas resolver la polémica por los crematorios y los posibles riesgos para la salud si son ubicados en un entramado urbano. Lo hizo a preguntas de la eurodiputada Lidia Senra tras la polémica surgida en Pontevedra.
