La Policía Nacional de Pontevedra acaba de dar un nuevo golpe al tráfico de estupefacientes a pequeña escala en la ciudad, en esta ocasión con el desmantelamiento de un "punto negro" de venta de drogas en pleno centro y en el que fueron identificados varios menores tanto como clientes como suministradores de las sustancias prohibidas.

Todo comenzó con la colaboración entre la Policía Nacional y la Local. A finales del pasado mes de abril los agentes municipales procedieron a la imputación de un joven residente en la capital por dedicarse al tráfico de hachís a pequeña escala entre distintos consumidores, entre los que se encontraban algunos menores de edad.

La información fue transmitida a los efectivos de la Policía Nacional, cuyos investigadores continuaron con las pesquisas para intentar identificar a varios de los suministradores de esta persona imputada en el mes de abril. Tirando del hilo llegaron al principal investigado en esta nueva operación policial, un joven que ya había sido objeto de investigaciones anteriores por su posible vinculación con el trapicheo de drogas a pequeña escala.

Los agentes intensificaron las vigilancias y seguimientos sobre dicha persona para tratar de reunir la mayor cantidad de indicios posibles, resultando especialmente dificultosas estas labores de control debido a los "horarios extravagantes" que tenía esta persona o a los continuos cambios de domicilio que realizaba. Finalmente, los policías lograron ubicar su residencia en un piso compartido con otras personas en la calle Palamios, muy cerca de un instituto, después de haber abandonado otro inmueble, entre otras razones, ante las quejas vecinales por su presunta actividad.

Una vez concluidas las pesquisas, y coordinados con la autoridad judicial, en la mañana del día 10 se procedió a la detención del principal investigado, quien en el momento de ser arrestado portaba 290 euros de los que se desconocen su procedencia, dado que esta persona no realiza actividad laboral alguna.

A continuación se llevó a cabo un registro en el interior de su domicilio, en el que se encontraron 12 gramos de cocaína repartidos entre distintas "papelinas", preparadas para su venta al menudeo. Se localizaron también otros 190 gramos de hachís en "bellotas" y tres plantas de marihuana. Los agentes también se incautaron de básculas de precisión. También apareció un arma de fogueo.

Los agentes practicaron otras cuatro detenciones más, uno de los detenidos menor de edad, acusados todos ellos por la Policía Nacional de vender hachís y cocaína al menudeo entre distintos jóvenes de la ciudad. Todos los detenidos fueron puestos en libertad tras ser oídos en declaración en sede policial y a la espera de que sean citados por el juzgado para responder por estos hechos.

La operación ha sido llevada a cabo por el Grupo de Tráfico Medio de Estupefacientes de la Comisaría de Pontevedra en colaboración con la Policía Local de esta ciudad.