La situación en las playas de Os Barcos y Panadeira se ha vuelto insostenible tanto para los vecinos integrantes de la plataforma SOS Panadeira, como para los responsables de los trabajos de construcción de los nuevos pantalanes del Real Club Náutico de Sanxenxo.

Por eso, la plataforma vecinal interpondrá hoy en los juzgados un recurso contencioso-administrativo, con el fin de que un magistrado paralice los trabajos. En el caso de que no llegaran a acuerdo con el náutico o con Portos de Galicia esto derivaría, finalmente, en juicio.

El recurso contencioso-administrativo será presentado en nombre de cinco vecinos que se consideran afectados por los trabajos de construcción de los nuevos pantalanes. Todos ellos forman parte de la asociación SOS Panadeira desde la creación de la plataforma y han permanecido permanentemente en los arenales desde cl comienzo de los trabajos.

Diálogo nulo

El portavoz de SOS Panadeira insistió en que si buscan la ayuda de la justicia es porque disponen de documentos que permiten comprobar la ilegalidad de las obras. "No es normal que se haga un informe de que no se necesita informe, cuando se altera el medio natural de esta forma", declaran desde la plataforma vecinal, haciendo referencia a la supuesta negativa de Portos de Galicia de cederle los documentos que autorizan la realización de las obras.

La asociación vecinal se muestra reacia a negociar tanto con Portos de Galicia como con el Real Club Náutico de Sanxenxo, por considerar que "no existe ningún interés por parte del Náutico de paralizar las obras, y cuentan con la colaboración de Portos de Galicia, como la han tenido desde el principio, pese a saber que se trata de una obra ilegal que afecta al medio ambiente".

A ello se suma la petición que el gobierno local envió en la jornada de ayer alegando que la instalación de los pantalanes incumple tanto el Plan de Utilización de los Espacios Portuarios del Puerto de Sanxenxo como su Plan Especial de Ordenación, que afecta plenamente al puerto y a los dos arenales en él incluidos, como son el de Os Barcos y el de Panadeira, a los que califica como "playas urbanas" y considera áreas continuas de protección intermareal y costera.