Maximino Couto Durán, el pontevedrés de 60 años de edad que el pasado sábado mató a su novia e hirió a otras tres personas, ingresó ayer en prisión tras declarar ante la titular del Juzgado de Instrucción Número 3 de Pontevedra. Couto afirmó que la muerte de María del Rosario Peso fue fortuita y que no quiso acabar con la vida de su compañera sentimental de forma voluntaria. Sin embargo, sí reconoció haber acudido al piso de su ex mujer en Mourente, Herminia Buceta, con la intención de matar a esta última, así como a una vecina, Concepción C.A., a la que asestó dos puñaladas. Aseguró, sin embargo, que no pretendía dar muerte al marido de ésta última, José P.P., a quien acuchilló tres veces cuando éste salió en defensa de su mujer. Por último, Couto también hirió en un brazo a un policía que intentaba detenerlo.

Según pudo saber FARO, Couto Durán relató al juez que la muerte de su actual pareja sentimental, Rosario Peso, se produjo en el medio de un forcejeo. El acusado tenía la intención de coger las llaves de una caseta en la que guardaba una serie de herramientas, algo que la mujer quería impedir. En medio de esta discusión, aseguró el detenido que la víctima cogió un palo y que, aunque nunca llegó a amenazarle con él, Couto Durán lo agarró y tiró de él, provocando que la mujer se cayese contra el "pico" de una caldera y se golpease contra un saliente de cemento. Una versión que, en principio, no concuerda con la hipótesis que maneja la Guardia Civil que cree que Couto Durán acabó con la vida de Rosario golpeando varias veces su cabeza contra el suelo.

En su declaración judicial, al parecer, Couto afirmó que en ese momento fue presa de los nervios y que intentó reanimarla dándole unos golpes en la cara. Posteriormente, decidió poner rumbo a Mourente para vengarse de aquellas personas que, a su juicio, le habían arruinado la vida con sus denuncias.

Un "martillón" y un cuchillo

Aseguró ante el magistrado que se armó con un cuchillo y con un "martillón", tal y como lo definió el mismo, y se fue en la búsqueda de su ex mujer a Mourente con la idea, según reconoció, de matarla. Herminia Buceta salvó la vida al no encontrarse en casa, estaba en una matanza, en Portas. En ese momento, Couto Durán eligió otra víctima en su lugar: Concepción C.A. Manifestó ante el juez que lo hizo porque en su día esta mujer había hecho diversas declaraciones en su contra en la televisión, después de que el presunto homicida fuese penado por malos tratos. Ésta, al parecer, fue la causa de su venganza y no que hubieran acudido como testigos a la vista en la que resultó condenado, ya que nunca lo hicieron.

El juzgado imputa a Maximino Couto un homicidio consumado, dos en grado de tentativa y otros dos delitos de lesiones.