La doctora y experta en gestión hospitalaria Guillermina Agulla se jubiló en 2017 pero ha regresado a la actividad para dirigir, por tercera vez, el hospital de Verín. Vuelve a la gerencia para cubrir la baja que dejó el médico Miguel Abad Vila al dimitir el pasado 27 de diciembre en medio del conflicto por el cierre del servicio de partos y las urgencias pediátricas. Reabrir el paritorio es su prioridad pero antes está en sus manos encontrar especialistas para cubrir las dos vacantes en Pediatría, un requisito insalvable para que los partos puedan programarse otra vez en este hospital. En su primer día, Agulla Budiño ha establecido contacto con tres pediatras que han mostrado interés por la oferta laboral. A una de ellas la recibió ayer en Verín y con los otros dos, residentes fuera de Galicia, mantiene contacto telefónico.
-¿Por qué decide una doctora jubilada desde hace tres años asumir la gerencia de un hospital que ya dirigió en dos ocasiones y regresar, además, en un momento tan convulso, con un encierro en el hospital que dura ya 40 días?
-La verdad es que nunca estuve parada pero la decisión tiene que ver con dos motivos principales que son reales y de corazón. El primero es que soy una apasionada de la gestión. Y la segunda, que se trata del hospital de Verín, al que siempre he tenido un gran cariño y con el cual tengo una empatía especial. Empaticé ya hace años con este hospital porque tiene un orgullo y un sentido de pertenencia muy fuerte. Eso lo vi cuando llegué y es algo que me atrae mucho, que los trabajadores de una empresa, y sobre todo de una empresa sanitaria como es la nuestra, sientan su centro de trabajo como algo propio, es una delicia. Empaticé con eso y esos son los motivos principales por los que me decidí.
-Teniendo en cuenta ese sentimiento de orgullo ¿entiende la movilización inmediata surgida entre el personal médico por el cierre del paritorio?
-Derecho a manifestarse tiene todo el mundo. Lo que pasa es que en el ámbito sanitario tratamos con personas y con enfermos, y no podemos andar con medias tintas. O tenemos las cuestiones (el servicio de Pediatría) completas o no se puede. Si en un momento dado la situación no permite hacer la actividad como se hizo siempre, no queda más remedio. Pero esto no pasa solo aquí, pasa en todas partes. De todas formas no estuve durante la evolución y no puedo hablar de algo que no conozco en profundidad.
-¿Cuál es la solución?
-El objetivo es abrir el paritorio, sin duda, pero para eso tenemos que cubrir las plazas de pediatría. Empezaré a trabajar para ver por donde vamos a resolver la situación y pelear lo que haga falta, porque el objetivo indiscutible es abrir el paritorio. Por el momento tengo a una pediatra citada esta mañana (por ayer), y con dos más hablaré por teléfono porque no se pueden desplazar. Todavía es prematuro y hasta que me siente a hablar con ellos no tengo la absoluta seguridad, pero espero y deseo solucionar esta situación.
-¿Como se plantea el trabajo con un encierro indefinido en el hospital?
-Sentándose a dialogar, hablar mucho y trabajar mucho. A la gente hay que explicarle y hacerle entender que esto es un hospital, no es un centro de trabajo cualquiera y no es el lugar idóneo para una aglomeración. Yo puedo ser exigente en cuestiones de trabajo, pero soy dialogante y quiero sentarme con todo el mundo para razonar las cosas.
-El presidente Feijóo le ha encomendado potenciar el hospital de Verín. ¿Con qué recursos cuenta?
-Estamos en una época complicada a nivel nacional de especialidades, es un problema que se viene arrastrando, que no es de ahora mismo. Hay dificultades para conseguir especialistas que se tienen que resolver y que a nosotros nos superan. De momento vamos a pelear por abrir el paritorio, arreglar la situación, y después ver las necesidades en otros servicios. Lo iremos viendo sobre la marcha.
-El hospital ha perdido Dermatología y hay escasez de profesionales en Cirugía y Anestesia.
-Son temas que vamos a ir añadiendo a la agenda para ir resolviendo. Hay que buscar especialistas donde sea, que estén formados y con las exigencias que requiere la profesión, tendremos que remover cielo y tierra para conseguirlos pero habrá que hacerlo.
-Tras el cierre del paritorio de Verín otros hospitales comarcales se han visto en la diana de futuros recortes. Usted dirigió también el de Valdeorras y los conoce bien. ¿Qué futuro les augura?
-Los hospitales comarcales son potencialmente importantes, indudablemente. No se puede centralizar toda la asistencia sanitaria y estos centros tienen un cometido importante para la población. Yo creo que el futuro no va encaminado en absoluto a disminuir sus posibilidades. No lo veo así ni lo vivo.
En su primera jornada de trabajo al frente de la gerencia del hospital de Verín, Guillermina Agulla expuso sus propuestas al personal médico y de enfermería y se reunió con la comisión delegada que protagoniza un encierro indefinido en el hospital que suma ya 40 días. Desde el "respeto" a la protesta, la gerente ha indicado que un hospital donde se trabaja con enfermos "no es el lugar idóneo" para una aglomeración de personas, señalando que la concentración en el interior de la instalación altera la marcha normal del hospital. En todo caso, mostró su respeto por la decisión de los manifestantes y les pidió un margen de confianza: "El objetivo es abrir el paritorio lo antes posible, si no es en 20 días es en 35, pero vamos a pelear por ello desde el primer día".
La portavoz de la plataforma sanitaria, Aurora Sola, ha dicho que le concederán ese margen pero el encierro se mantiene en su ubicación hasta que la apertura del paritorio "sea oficial".
Por su parte, el jefe de Ginecología del hospital de Verín, Javier Castrillo, se mostró optimista con el regreso de Agulla: "Es una persona resolutiva y la consigna que trae es reabrir el paritorio y recuperar el hospital. Creo que sí lo va a hacer pero hasta que no lo veamos mantendremos la presión; no vamos a soltar lo conseguido por buenas palabras", señala.
