La Consellería de Medio Rural informó del balance del incendio que sufrió el concello ourensano de Chandrexa de Queixa, tras quemar casi 20 hectáreas.

El fuego que empezó a las 1,10 horas del pasado 13 de septiembre, en la parroquia de Casteloais, quedó controlado ese mismo día y estabilizado al día siguiente.

Según las estimaciones del departamento autonómico, el fuego quemó un total 19 hectáreas, la mayoría de ellas de monte raso (17) y dos de monte arbolado.

Para las labores de extinción, se movilizaron nueve agentes, 29 brigadas, tres motobombas, cinco helicópteros y dos aviones.

Los servicios de extinción siguen trabajando en las zonas donde se produjo una alta actividad incendiaria con actuaciones de prevención para que las cenizas no se reaviven y se produzca una tragedia mayor.

La inestabilidad meteorológica de estos dos últimos días, en forma de precipitaciones débiles, ayuda a bajar el riesgo de actividad incendiaria en los montes ourensanos, después de quince días de intenso trabajo para los servicios de emergencias donde se registraron más de 60 incendios en la provincia.

Las previsiones harán que el suelo se humedezca, pero un ojo estará puesto en las posibles lluvias intensas y al lodo que se pueda formar en torrentes.